La primera mujer aceptada en la Real Sociedad Geográfica
inglesa y elegida en la Real Sociedad Fotográfica del mismo país, sufría
de raras enfermedades que se curaban al poner pie fuera de casa.
Armando Enríquez Vázquez
Viajar, para conocer, para descubrir, para ocultarse, para cubrirse
de gloria, para huir de uno mismo. Parece haber cientos de razones para
viajar y miles más que inventamos. Pero viajar por viajar por el simple
placer de conocer diferentes lugares parece haber sido verdadera y única
razón para que una dama victoriana se convirtiera en la más afamada
exploradora inglesa del siglo XIX. Aunque ella decía que era la forma de
combatir sus enfermedades.
Isabella Bird nació en 1831, hija de un párroco. Isabella fue educada
junto con su hermana menor, Henrietta, en casa por su madre, las
mujeres en aquella época en Inglaterra no iban a la escuela, desde
pequeña Isabella fue una niña enfermiza, encerrada en su hogar. El
médico de la familia recomendó a su padre que la niña debía cambiar de
escenarios salir un poco. De esta manera, Isabella comenzó a acompañar a
su padre por lo recorridos que éste hacia para visitar a los feligreses
y su salud mejoró.
A los dieciocho años Isabella fue intervenida quirúrgicamente para
extirparle un tumor en la columna vertebral, una vez más los doctores le
recomendaron el aire fresco de las montañas escocesas para reponerse.
El viaje le sentó de maravilla a la joven, que además comenzó a escribir
y publicar diversos artículos con el tema de su viaje. De regreso a
casa Isabella volvió a padecer de dolores de cabezas y otros achaques.
Decidió entonces hacer un largo viaje por el mar. Su padre le dio cien
libras, dándole el permiso que equivalía a lo que ese dinero le pudiera
proporcionar. A los 22 años Isabella zarpó con rumbo a Halifax en Canadá
para visitar a unos familiares, pero pronto se aburrió de la vida
monótona de sus parientes y viajó por los estados del noreste de los
Estados Unidos, conoció al escritor Washington Irving, quien era a su
vez un viajero y había escrito libros acerca de los lugares ocupados por
los árabes que había conocido en España, Cuentos de la Alhambra es el más conocido para nosotros hoy en día. Tras ese primer viaje Isabella escribió un libro que se llamó Una inglesa en América, que
fue un éxito y le redituó a Bird buenas ganancias. Con una buena parte
de ellas Isabella compró botes para pescadores escoceses que los
necesitaban.
En 1857 Isabella regresó a los Estados Unidos, esta vez viajo a la
región de los Grandes Lagos y regresó a Inglaterra. A los pocos días de
su regresó murió su padre. Ella, su madre y su hermana se mudaron a
Edimburgo y en 1866 murió la madre, las dos hermanas decidieron entonces
mudarse al pueblo de Tobermary, en Escocia. Para 1872 los achaques
habían regresado, Isabella entonces se preparó el remedio perfecto y
zarpó con rumbo a Australia, en los años en casa se había dedicado a
ayudar a escoceses que buscaban migrar a Australia y Nueva Zelanda. El
viaje fue un fracaso; a Isabella no le gustaron ni Australia, ni Nueva
Zelanda así que decidió partir rumbo a California pero el barco llamado
Nevada era viejo y tuvo problemas durante la travesía obligándolo a
detenerse en Hawaii, también conocido en esas épocas como las Islas
Sandwich. Isabella se sintió maravillada en el archipiélago, la flora,
la fauna, los volcanes activos la impresionaron, en compañía del
científico inglés William Green subió a la cima del volcán Kilauea,
Isabella permaneció seis meses en las Islas antes de Zarpar de nuevo
rumbo a California. Tan pronto desembarco en San Francisco compró boleto
de tren para conocer Colorado, el más reciente de los estados de la
unión americana y donde ella había escuchado que el aire de las
Rocallosas era muy bueno para la salud, en Colorado conoció a un
forajido tuerto llamado Jim Nugent a quien apodaban “Rocky Mountain Jim”
y que hacía también de guía de turista. En una de sus cartas a su
hermana Isabella escribió a cerca de este personaje “Es un hombre del
que cualquier mujer se puede enamorar, pero ninguna mujer en su juicio
se casaría con él.” Jim también se enamoró de la inglesa, pero como ella
escribió, la relación no prosperó y ella regresó a Inglaterra para
escribir sus siguientes libros. En menos de un año Nugent fue asesinado.
En 1878 Isabella viajó a Japón, China, Vietnam y Malasia. En 1880 su
hermana Henrietta murió y ella acepto las propuestas de matrimonio de un
antiguo pretendiente. Su salud comenzó a mermar de nueva cuenta, en
1886 su marido murió e Isabella pudo aplicar la vieja medicina. En esta
ocasión viajó a la India, llegó al Tibet, prosiguió su vaije por Persia,
el Kurdistán y Turquía, junto con un grupo de soldados ingleses viajó
de Baghdad a Tehrán. En 1892 se convirtió en la primera mujer en ser
reconocida por la Real Sociedad Geográfica y en 1897 se le aceptó como
miembro de la Real Sociedad Fotográfica. Ese año, a la edad de 66
emprendió su último gran viaje, esta vez a los ríos Yang tsé en China
convirtiéndose en la primera mujer en viajar por la ribera del rio
chino, y el Han en Corea, tras estos viajes llegó a Marruecos, donde se
dice que el sultán era admirador de sus libros y le regaló un corcel más
alto que la exploradora que consiguió una escalera para poder montar al
corcel y viajar con los bereberés por el desierto africano.
En 1904 regresó a Edimburgo y poco antes de su cumpleaños número
setenta y tres Isabella Bird murió. Sobre el escritorio dejó los planes
de otro viaje a China. Los achaques se habían vuelto a hacer presentes
tan pronto como puso pie en casa. Durante sus viajes Isabella sufrió
hipotermia, se enfermó de cólera, fue víctima del machismo de la época ,
En China estuvo a punto ser linchada por una turba enfurecida que la
acusaba de comer niños, pero nunca, durante sus viajes se quejó de sus
achaques de espalda o de cabeza, a pesar de haber montado en caballos y
elefantes escalado montañas y volcanes. El aire victoriano de Inglaterra
la asfixiaba.
A lo largo de su vida Isabella publicó 10 libros con las anécdotas de
sus viajes, cientos de artículos en revistas y dos libros con
fotografías de los mismos.
publicado en thepinkpoint.com.mx 27 de junio de 2012
fotografia: wikipedia.org
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