domingo, 5 de abril de 2020

Campeón de la NFL con 6 empates.




La temporada de 1932 de la NFL es un caso único en la historia de la liga del futbol americano profesional.

Armando Enríquez Vázquez

Lo habitual es que el equipo con más triunfos a lo largo de una temporada, o al menos el que gana la final es el merecido campeón de cualquier liga.
La NFL durante sus primeros años definía como campeón al equipo que mejor posición tenía dentro de la liga. Esto no significaba que fuera el más ganador como sucedió en la extraña temporada de 1932, además por esta extraña situación ese año se decidió llevar a cabo la primera final de la liga.
Al iniciar la temporada 13 de la NFL, la liga contaba con 8 equipos: Osos de Chicago, Empacadores de Green Bay, Espartanos de Portsmouth, Bravos de Boston, Gigantes de Nueva York, Dodgers de Brooklyn, Cardenales de Chicago y los Stapletons de State Island. Los calendarios eran irregulares y no todos los equipos jugaban el mismo número de encuentros, a veces se enfrentaban a un mismo adversario en más de dos ocasiones. El campeón más allá del número de victorias estaba dictado por el porcentaje del vencedor.
Los Empacadores habían ganado los tres campeonatos previos a esta temporada y eran los rivales a vencer por los Osos y sobre todo por los Espartanos que en 1931 habían quedado en segundo lugar de la NFL.  
Los Espartanos contaban entre sus jugadores con Dutch Ckark, llamado El Holandés Volador y con otro corredor de nombre Father Lumpkin. Los Empacadores habían perdido a sus estrellas y el novato Clarke Hinkle comenzaba tuvo una brillante temporada, pero nada igualaba al par de corredores de los Osos; Red Grange, El Fantasma y Bronko Nagurski, con esos dos corredores se podría decir que nada podía impedir el campeonato para los Osos y aunque lo ganaron, es un campeonato que no deja de tener una y muchas aristas que lo hacen cuestionable.
La primera y más llamativa es que tras trece encuentros, los Osos, únicamente ganaron 6 juegos, el asunto es que sólo perdieron un encuentro. Chicago terminó la temporada de 1932 de la NFL con 6 ganados, 1 perdidos e increíblemente 6 empatados. El equipo había ganado su último encuentro a los Empacadores, pero el número de encuentros que los de Green Bay ganaron a lo largo de su temporada eran mayor que el de los Osos, también habían perdido más juegos que los de Chicago, porque sólo habían empatado un encuentro. El porcentaje de los Osos era superior al .800 mientras que los Empacadores tenían un porcentaje de .769. Por su parte los Espartanos, jugaron dos juegos menos que Osos y Empacadores, ganaron seis, perdieron 2 y empataron cuatro para un porcentaje de .750, los Osos empataron en dos ocasiones con los Espartanos, y una con los Empacadores, Cardenales de Chicago, Stapletons de Staten Island, Bravos de Chicago.
El dueño de los Osos; George Halas argumentó su porcentaje como punto esencial para ser protagonista de la primera final de la NFL, se opuso a que su rival fueran los Empacadores que eran el equipo al que por derecho correspondía el título por los juegos ganados y en su defecto a enfrentar a los Osos en la final. Sin embargo, Acuerdos entre Halas, el comisionado de la NFL Joe Carr, Halas arregló la final en contra de los Espartanos de Portsmouth.  
La manipulación de esa final empezó con la selección arbitraria de los finalistas y continuó con las necesidades económicas de ambos equipos, sobre todo a la ambición desmedida de Halas quien ante la imposibilidad de poder llevar a cabo el encuentro en el Wrigley`s Field, casa de los Osos, por las extremas condiciones invernales, decidió llevar a cabo el encuentro en la casa del equipo de chicago de hockey, llamado Estadio Chicago. El juego se realizó el 18 de diciembre de 1932.
Obviamente al ser una arena de hockey las medidas eran mas pequeñas, por lo que Halas impuso reglas muy extrañas como la de que una vez que el equipo alcanzaba el medio campo el ovoide debía ser colocado veinte yardas atrás para compensar la diferencias con un emparrillado oficial. Se prohibieron los goles de campo y solo se puso un poste para intentar los puntos extras.
Para completar el cuadro la arena había sido utilizada los días anteriores al juego por lo que el terreno de juego que había sido cubierto con tierra, pero esta quedo mezclada con la mierda y el estiércol de los animales del circo lo que llevó a algunos jugadores a vomitar y ninguna de estas dos razones llevó a la suspensión del juego de campeonato. Los Osos ganaron el juego por marcador de 9 – 0. El único touchdown que se anotó aquella tarde sucedió en el último cuarto, cuando Nagurski al ver la posibilidad de ser detenido por los defensivos de Portsmouth decidió retroceder y lanzó un pase a Grange que corrió dos yardas. La jugada fue polémica, el entrenador de los Espartanos alejó que Nagurski no se encontraba cinco yardas atrás de la línea de scrimage como marcaban las reglas, pero su enojo y gritos fueron nulos. Minutos después los Osos provocaron un safety y de ahí el marcador final. Con todos sus problemas y las dudas que dejó la final de 1932, vale la pena hacer notar que la primera final de la NFL, fue la primera también en jugarse bajo techo.
A final de la temporada y tras la manipulación total de la temporada por Halas, la NFL tuvo que hacer cambios de importantes a su reglamento. La liga siguió siendo manejada por décadas por Halas y otros hampones que balancearon la ambición y actitud dictatorial del dueño de los Osos y en otras la reforzaron.  


imagen; wikipedia.org

No hay comentarios:

Publicar un comentario