sábado, 21 de noviembre de 2015

¡Compro la quinta avenida y pago el impuesto!




Detrás del más popular juego de mesa se encuentra la mente creativa de una mujer y sus ideas liberales en favor de un sistema económico opuesto al capitalismo, así como el plagio de su idea.

Armando Enríquez Vázquez
.
Cuantas veces los sueños de grandeza, de fortuna ilimitada se hacen realidad a través de un sencillo tablero de juego, títulos de propiedad y dineros falsos y pequeñas fichas de diferentes formas. Todo esto comenzó a principios del siglo XX en la mente de una brillante mujer con ideas de liberales que con el juego quería enseñar una teoría económica popular en la época y no a promover el capitalismo.
Elizabeth J. Magie nació en el estado de Illinois en 1866. A lo largo de vida prefirió el nombre de Lizzie. Su padre, James Magie, fue editor de periódicos y un hombre que apoyó y acompañó a Abraham Lincoln en su recorrido por el estado de Illinois. Fue también responsabilidad de su padre el que Lizzie leyera las ideas radicales de Henry George, economista y filósofo que desarrolló una teoría conocida como Impuesto único. La teoría responsabilizaba a los dueños de tierras de la desigualdad social y por extensión de la pobreza. Todo lo que existe en la naturaleza, debe ser disfrutado y compartido por todos los seres humanos, pues nos pertenece, incluida la tierra. Por ende las ideas de George determinaban que eran los propietarios de tierras los únicos que debían pagar impuesto y este impuesto único por la tenencia de la tierra debía ser suficiente para generar el bienestar de todos los seres humanos y hacerse cargo de la nueva infraestructura. El libro más importante de George fue Progreso y pobreza.
Lizzie simpatizó con las ideas de George y el impuesto único a lo largo de su vida, incluso a principios del siglo pasado vivía en la comunidad de Arden en Pensilvania, fundada en una propiedad comprada por el escultor Frank Stephen y el arquitecto Will Price con el objetivo de llevar a la practica el modelo económico de Henry George. Lizzie aprendió estenografía y se convirtió en una de las pocas mujeres que trabajaban como estenógrafa a finales del siglo XIX. Lizzie Magie fue escritora, actriz, periodista y sobretodo inventora. En 1893 le fue concedida una patente por el diseño de un aditamento que permitía un mejor deslizamiento del papel en los rodillos de la máquina de escribir. Lizzie, también se adelanto a sus tiempos y fue una defensora de los derechos humanos y de las mujeres, durante su juventud publicó, en un momento que descubrió lo insuficiente de su salario semanal, un anuncio en la prensa que ponía a la venta del mejor postor a una esclava blanca, o sea ella, obviamente el anuncio se convirtió en un tema a nivel nacional en Estados Unidos.
En 1904 se el gobierno de Estados Unidos le otorgó una nueva patente sobre un juego que Lizzie inventó para enseñar la teoría de Henry George sobre el impuesto único. El juego llamado El juego del latifundista, consistía en un tablero con una pista alrededor del tablero donde el jugador se movía de manera circular y constante, lo querepresentó una de las grandes innovaciones en los juegos de mesa aportada por Magie. El tablero se dividía en diferentes casillas que representaban propiedades que los jugadores podían comprar y pagar el impuesto correspondiente. A cada jugador se le asignaba la misma cantidad de dinero al inicio de la partida y las estrategias y suerte serían las responsables de llevarlos a la riqueza o a la casilla de la pobreza, de la cual solo podían salir al reunir cierta cantidad de dinero. Los jugadores podían pedir dinero prestado al banco o a otros jugadores. El tablero presentaba también una casilla de cárcel, las líneas de ferrocarril para transportar los bienes, así como las compañías de agua y luz que producían ganancias a sus propietarios basada en los números tirados en los dados por el jugador que caía en ellas. La casilla de inicio del juego llamada La Madre Tierra, constituía un lugar por el que al volver a pasar en su periplo, el jugador recibía un salario para poder continuar en el juego. Las bases estaban puestas.



Todo esto suena muy conocido, y es porque sin saberlo Lizzie Magie había creado el más popular de todos los juegos de mesa del siglo XX, unos 25 años después su idea sería capitalizada, frente a la negligencia de la oficina de patentes de Estados Unidos, por un oportunista y la empresa Parker Brothers. Pero en un inicio y tras la patente, El juego del latifundista fue un éxito entre los círculos liberales e intelectuales de la costa este de Estados Unidos. Lizzie con un grupo de amigos formaron una empresa que imprimió y vendió los primeros tableros, acompañados por el libro de reglas. El juego se hizo tan popular entre ciertos círculos que incluso un profesor en la Universidad de Pensilvania, Scott Nearing, utilizaba el juego en sus clases, lo que popularizó el juego también entre los estudiantes de la famosa Ivy League. El tablero y los libros de reglas eran copiados por los estudiantes y de esta manera el juego comenzó a modificarse, como diríamos hoy se tropicalizó y diferentes grupos de estudiantes y lugares tenían sus propias y muy particulares versiones del juego. El agregar edificios, iglesias y hoteles que aumentaran el valor de las propiedades y de su rentas fueron agregados que se hicieron en las diferentes versiones que se jugaban.
En 1924, Lizzie Magie Phillips para ese momento, pues en 1910 se casó, renovó la patente de su creación y le hizo algunos ajustes a las reglas. En 1930 aproximadamente, el juego llegó a la comunidad cuáquera de Atlantic City, que también hizo sus propias adaptaciones al tablero y al juego, empezando con el uso del nombre de las calles de Atlantic City para las casillas y también creando reglas que lo volvieron fácil de entender y jugar a los niños, lo que en un futuro ayudó a su popularización como un juego totalmente familiar.
Después en 1932, de acuerdo a la historia que durante décadas Parker Brothers sostuvo como oficial un hombre de Charles Darrow creó y patentó lo que hoy conocemos como Monopoly. En 1931 Lizzie renovó una vez más la patente y en 1932 Parker Brothers que ya había estado en negociaciones con la mujer, incluso había impreso un de juego que también inventó Magie llamado Mock Trial en 1910, pagó quinientos dólares a Lizzie por los derechos del Juego del latifundista  y se ocupó de no venderlo, ni promocionarlo, incluso si alguien quería las reglas del juego tenía que contactar de manera personal a LIzzie.
Junto con la compra de los derechos del Juego del latifundista, Parker Brothers compró y publicó dos juegos de Lizzie King’s Men, un juego de estrategia del estilo de las damas y un juego de tablero llamado Bargain Day. La producción de amos juegos surgieron al parecer más de un compromiso forzado para obtener los derechos del Juego del Latifindista y sacarlo de la competencia de lo que habían decido llamar Monopoly y le dio tantos millones de dólares tanto a la empresa como al Charles Darrow.
Lizzie Magie Phillips murió en Arlington Virginia en 1948. Tenía 82 años de edad.

En 1973, gracias a una demanda de un profesor de nombre Ralph Anspach en contra de Parker Brothers, que, a su vez, lo demandó por un juego llamado Anti Monopoly, la historia de Lizzie Magie fue recuperada, ya que el profesor investigó los orígenes e historia verdadera del Monopoly.  

publicado en mamaejecutiva.net el 4 de noviembre 2015
imagenes: biography.com
                 

No hay comentarios:

Publicar un comentario