Con su cámara captó,
el glamour de San Francisco, la desesperanza en los campos agrícolas durante
los 30’s y las miradas desoladas en los campos de detención en Estados Unidos
durante la II Guerra Mundial.
Armando Enríquez
Vázquez
“La cámara es un instrumento que enseña a las personas a ver
sin la cámara” declaró alguna vez Dorothea Lange, una de las más importantes
fotógrafas de la historia.
Una de las fotografías que más me gusta de Dorothea Lange
sintetiza el tipo de persona y sobre todo de fotografía de la norteamericana,
sobre la cinta asfáltica de una carretera desierta dos trabajadores de esos que
en la década de la mayor crisis económica de Estados Unidos el siglo pasado
buscaban trabajo a lo largo y ancho de aquel país, principalmente en los campos
agrícolas de California. Vemos a los delgados hombres de espaldas con las
maletas donde guardan sus pertenencias, muy probablemente las únicas, también
al pie de la carretera hay un enorme espectacular en el que vemos a un hombre
sentado cómodamente en un confortable sillón. En el espectacular se lee: La próxima vez prueba el tren. ¡Relájate!
Lange nació el 26 de mayo de 1895 en Hoboken, Nueva Jersey.
Una ciudad localizada frente a la isla de Manhattan sobre la margen del río
Hudson. Dicen que dos sucesos marcaron la vida de Lange, la polio que sufrió en
la niñez y que le dejó una cojera por el resto de su vida, así como una pequeña
parálisis en la pierna, y el abandono de su padre, quien cuando Dorothea tenía
12 años abandonó a la familia, por lo que la madre anuló los nombres de sus
hijos para otorgarles únicamente el apellido materno: Lange.
Dorothea se interesaba por la fotografía desde temprana
edad, pero se interesaba también por la vida y en particular por la vida de los
barrios bajos de Nueva York. Se iba de pinta con su mejor amiga Florence
Halstrom y juntas recorrían la zona judía.
Al terminar la preparatoria Dorothea comenzó a trabajar en
laboratorios fotográficos en los que aprendió todo lo relacionado con el tema,
aunque nunca terminó pues no presentó una sola tarea, se inscribió en la
Universidad de Columbia para tomar un curso de fotografía básico con el
fotógrafo Clarence White. Poco después decidió junto con Florence conocer el
mundo y juntas zarparon a Nueva Orleans y más tarde a San Francisco donde les
robaron todo el dinero que llevaban, así que tuvieron que ponerse a trabajar. Al
demostrar la calidad de su trabajo Lange estableció su primer estudio
fotográfico en San Francisco, en él se dedicó principalmente a los retratos de la
alta sociedad de la ciudad, en especial de la comunidad judía. Se convirtió en
una fotógrafa importante en la Ciudad, tenía mucho trabajo y aplicaba todo lo
aprendido en los estudios neoyorquinos y en la clase de White. En 1920 se casó
con un pintor de nombre Maynard Dixon. Con Maynard tuvo dos hijos; Daniel y
John. El matrimonio duró 15 años. De 1931 a 1932 el matrimonio se mudó a Taos,
Nuevo México con otros artistas para fundar una comunidad creativa, el proyecto
fracasó y los Maynard regresaron a San Francisco. Tras caída brutal de la
economía a principios de los años 30, el propio estudio de Lange vio disminuida
la clientela y la calidad de la materia prima que utilizaba, lo que molestaba
profundamente a Dorothea. Aburrida, con poco trabajo en el estudio, Lange comenzó
a tomar fotos de los desempleados que se reunían a fumar y hablar afuera del
estudio. Llaman la atención algunas fotos de esos días que muestran a la
población de origen chino alternando con los anglos sin que esto parezca un
problema para estos últimos, incluso en alguna de sus fotos se pueden observar
pancartas de protesta en chino al lado de las escritas en inglés lo que muestra
un país más integrado hace ochenta años que lo que es hoy Estados Unidos.
En 1934, el día del trabajo Dorothea salió a calle y logró
una serie de fotografías de las manifestaciones que llamaron la atención de los
medios locales y nacionales. Ese año un escritor y sociólogo de Paul Schuster
Taylor descubrió el trabajo de Lange y le pidió ilustrar un texto de su autoría
para la revista Survey Graphic. La
cual se especializaba en sociología y política. La relación de Lange con la
revista duró algunos números.
1935 marcó dos cambios radicales en la vida de Lange, tras
el divorcio de Dixon, Dorothea se casó ese mismo año con el Paul S. Taylor,
además ese año el gobierno de Estados Unidos le ofreció un contrato para
documentar a los trabajadores agrícolas que migraban por el interior de Estados
Unidos más otros migrantes que se sumaban a las cosechas. Las fotografías
tomadas por Lange gracias a ese contrato se han convertido en el trabajo que la
gente reconoce mejor de Dorothea Lange. Los dos años que duró ese primer
contrato Lange viajó y fotografió a los pobres de diferentes estados de la
nación americana, la suspensión de sus pagos duró sólo poco tiempo.
En 1939 comenzo con Taylor a trabajar en un libro que se
llamó American Exodus y que fue
publicado al año siguiente. El director de cine John Ford utilizó las fotos de
los trabajadores agrícolas de California como base de la representación visual
para su aclamada versión cinematográfica Las
Viñas de la Ira basada en la novela homónima de John Steinbeck y que
protagonizó Henry Fonda.
En cuanto Estados Unidos entró a la II Guerra Mundial, Lange
fue contratada por el gobierno de Estados Unidos para documentar el traslado de
los japoneses que vivían o habían nacido en Estados Unidos a los “campos de
acogida”, lugares que ofrecían condiciones similares a los campos de
concentración alemanes.
Tras el final de la Guerra Lange realizó proyectos fuera de
Estados Unidos junto con su hijo Daniel Dixon, realizó fotorreportajes y
trabajos más amplios sobre Irlanda. Con Ansell Adams, el legendario fotógrafo, realizó
para la revista Fortune un trabajo acerca
de los astilleros de la marina en Richmond, California. También con Adams y su
hijo Daniel trabaja para la revista Life un
reportaje sobre la vida de los mormones. Trabaja para la ONU, para la revista Life. Con su esposo viajó a Ecuador,
Venezuela, Japón, Corea del Sur, India, Nepal y otros países del sur de Asia,
así como a Egipto.
En 1958 comenzó a dar clases en la Escuela de Bellas Artes
de California.
En 1964 el Museo de Arte Moderno de Nueva York contactó a Lange
para crear una retrospectiva de su obra, lo que la convirtió en la primera
mujer fotógrafa en ser honrada de esta manera por el museo, antes que ella sólo
cuatro hombres habían merecido una retrospectiva Paul Strand, Walker Evans,
Henri Cartier-Bresson y Edward Weston. La exposición se inauguró el 26 de enero
de 1966. Dorothea Lange murió meses antes el 11 de octubre de 1965, casi hasta
el final de su vida trabajó en la selección de sus fotografías para la
exposición.
publicado en mamaejecutiva.net el 13 de mayo de 2019
imagen wikipedia.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario