lunes, 2 de abril de 2012

La Crísis del desempleo

El próximo obstáculo que tiene enfrente el mundo es la falta de trabajos adecuados para la creciente población y sobre todo los jóvenes egresados de carreras y a los que les vendieron la idea de tener el futuro por delante.

Armando Enríquez Vázquez



la crisis del desempleo

Un fantasma recorre el mundo, el fantasma del desempleo. Las crisis económicas, reales o ficticias, están aún por pasar la más feroz de sus facturas: el desempleo. Los números del desempleo en el mundo entero están a la alza. Los países más golpeados son los países industrializados, en especial  los de la Eurozona que en muchos casos no habían visto tasas de desempleo tan altas desde la II Guerra Mundial. España por arriba del 20%, Portugal e Irlanda con 14.8%, Francia con 10%. De este lado del Atlántico; Estados Unidos un 8.3%.
Pero, además, lo más alarmante es que si estos números los llevamos a los jóvenes, las cifras por lo menos se duplican en todos los países. En España, por ejemplo, la cifra alcanza el 53% y en Portugal el 30%. Eso sin contar que las cifras no dicen toda la verdad. Después de la crisis económica el tipo de empleos creados no se comparan a los perdidos. Por ejemplo en Estados Unidos, la mayoría de los empleos recuperados después de la crisis, están en las áreas de servicio y en especial en los restaurantes lo que podemos traducir en meseros y garroteros, chef y gerentes. El tipo de prestaciones no se comparan con las ofrecidas por las compañías que hoy ya no existen. Los trabajos que se ofrecen hoy son peor pagados y en muchos de los casos van en contra de las leyes locales de trabajo, sin embargo la gente no reclama y los toma. En Australia unos 4 millones de personas se ven forzados a aceptar el trabajo que se les presenta sin cuestionar o discutir las condiciones y salario del mismo, so pena de no tener ningún empleo. Pero si ese un problema en el mundo industrializado, en el continente Africano, la situación es tan grave que para muchos organismos internacionales África, como en muchos otros campos, simplemente no existe en el terreno del empleo. Existen países como Zimbabue con 95% de desempleo reportado a 2009, Liberia 85% o Burkina Faso con77%. Poblaciones y generaciones enteras de africanos parecen destinadas al fracaso, incluso a la desaparición.
¿Es así de terrible el panorama?
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) el reto de los gobiernos del mundo es crear en los próximos diez años por lo menos 600 millones de empleos nuevos, sí se quiere mantener un crecimiento estable de la economía mundial. El reto no es sencillo en un mundo que todos los días parece ver entrar a un nuevo país en recesión.  Según palabras del director general del organismo se calcula que hoy en día mil millones de personas en el mundo carecen de trabajo o viven en la pobreza. En nuestro país, que según la OCDE, tiene uno de los más bajos índices de desempleo de 5.33% en febrero pasado, la tercera parte de los profesionistas del país se encuentran desempleados. Nunca, hasta ahora, el sistema capitalista mostró sus garras tan llenas de codicia y ambición. Ajeno a cualquier tipo de humanismo. Listo para hacerse fracasar  a sí mismo: El modelo económico que veinte años atrás para muchos había demostrado su supremacía, está a punto de morderse la cola.  Y son la población menor de 30 años, aquellos, que anhelan construir un futuro, familia, bienestar a los que se les está negando la oportunidad, a pesar de que existía en el sistema la promesa tácita de que sus estudios profesionales serían recompensados con un mejor nivel de vida. El estudio de la OIT les da pocas esperanzas y cree que seguirán siendo el sector con menos oportunidades en los próximos años, incluso sí la situación mundial mostrara tendencias positivas.
El optimismo y la buena voluntad no habrán de cambiar la situación, que se agrava cuando muchos de los empleos que se pierden hoy en día, realmente se deben a reemplazos tecnológicos;  máquinas, sistemas y programas vuelven a los seres humanos prescindibles dentro de las cadenas productivas.
¿Dónde tendrán que buscar los hombres y mujeres de mañana los satisfactores que hoy el sistema comienza a negarles? Cuando vemos en las calles de Madrid, Barcelona, París, Nueva York, Washington, Chicago o Oakland a miles de hombres y mujeres, con pancartas de somos el 99%.  ¿Podemos ver los cambios en el horizonte? ¿Podemos anticipar la tempestad?

Publicado por blureport.com.mx 2 de abril de 2012

No hay comentarios:

Publicar un comentario