viernes, 28 de enero de 2022

Narcos México la tercera entrega de la tragicomedia nacional

 


Otra vez la combinación de excelentes guiones, buena dirección y actuaciones excepcionales muestra que la franquicia Narcos es la mejor en cuanto al crimen organizado que nos abruma.

Armando Enríquez Vázquez

La franquicia de Narcos, dedicada al crimen organizado de México a partir de los años setenta, llegó en 2021 a su tercera entrega, ubicada en la década final del siglo XX. La serie es sin duda la más artística de las versiones que se han hecho sobre nuestra desgracia nacional; como en el caso de las primeras temporadas dedicadas al narcotráfico en Colombia; los buenos guiones, las direcciones impecables, así como el casting y las actuaciones son la base de está extraordinaria serie.

Producida por la centenaria y legendaria empresa francesa Gaumont, las dos franquicias; Colombia y México han contado, con todo y las limitantes que imponen el poder y el crimen organizado aun presentes en ambos países, de manera más que digna la obscena realidad del continente, dejando una serie de ficción histórica de gran relevancia. La tercera temporada de Narcos México nos habla del vacío de liderazgo y poder entre los narcotraficantes mexicanos dejado por la captura de Miguel Ángel Félix Gallardo, interpretado de manera magistral por Diego Luna, en las dos entregas pasadas. Los hermanos Arellano Félix y el Cartel de Tijuana tomaron las riendas del tráfico en el país, pronto dos piedras se les aparecieron en el camino; el Cartel de Sinaloa y Amado Carrillo, el famoso Señor de los Cielos.

José María Yazpik es uno de los grandes pesos actorales de la tercera entrega pero no el único, su Amado Carrillo hace del narcotraficante un solitario similar al Miguel Ángel Félix Gallardo de Luna, pero sin el arribismo y elegancia del llamado en sus días Zar del narcotráfico, además de contrastar con la familia al estilo de la mafia de El Padrino de los Arellano Félix; Benjamín, Ramón, Francisco interpretados sin fuerza, ni importancia por actores totalmente olvidables, no así la fuerza de Mayra Hermosillo en el papel de Enedina Arellano Félix y que con su porte y silencio nos muestra a esta mujer que nunca ha sido detenida y de la que no se sabe su paradero, es considerada el cerebro del clan.

Historias paralelas de familias enfermas, no sólo porque las hijas de Amado Carrillo y Benjamín Arellano Félix padecen enfermedades terminales, sino por las historias de los Narco Juniors, esos aburridos jóvenes de clase alta de la sociedad tijuanense que decidieron salir de su mediocridad para jugar a ser parte del crimen organizado, solo para que al final fueran desechados de la peor manera por esos mismos criminales a los que idealizaron.

El trabajo de Luis Gerardo Méndez en el papel de un ficticio patrullero de Ciudad Juárez llamado Víctor Tapia, que comienza a investigar la desaparición y asesinatos de las jóvenes de las maquiladoras de la ciudad fronteriza, es extraordinario. Lejos, muy lejos de la comedia a la que nos tiene acostumbrados, Méndez construye el papel de un policía perdedor, mediocre, incapaz de involucrarse en nada bueno o malo hasta que, a regañadientes por petición de su esposa, visita a una vecina cuya sobrina ha desaparecido. Víctor comienza a visitar la morgue de Juárez de manera constante, sólo para ir descubriendo poco a poco el escondido terror que aún se vive en la ciudad más grande de Chihuahua, en la que se han cometido miles de feminicidios sin esclarecer. Luis Gerardo Méndez esta sin duda en uno de los mejores papeles de su vida y creo que será tan memorable como sus juniors de Nosotros los Nobles o Club de Cuervos.

Lo mismo sucede con la actriz Luisa Rubino que da vida a Andrea Núñez otro personaje ficticio que en su caso representa a todos los valientes periodistas tijuanenses que han luchado y luchan por dar a conocer los vínculos del entre políticos, empresarios y narco traficantes. Manuel Uriza interpreta al corrupto político mexicano, Carlos Hank González, cuyo nombre a diferencia de otros políticos en las entregas anteriores no fue alterado y sus nexos con Amado Carrillo y los Arellano Félix son ventilados en la tercera entrega. También están otros conocidos de la serie en su versión México y de franquicia original en Colombia; Wagner Moura (Pablo Escobar), Alberto Ammann (Pacho Herrera), Damián Alcázar (Gilberto Rodríguez Orejuela), los tiempos de los carteles colombianos y mexicanos son simultáneos y como le dice Pacho Herrera a Amado Carrillo, los mexicanos empezaron trabajando para los colombianos como transportistas y a la vuelta de la esquina fueron los colombianos los que terminaron al servicio de los grandes carteles mexicanos que ganaron y ganan más de lo que Pablo Escobar jamás soñó.

En esta tercera entrega se cuenta el nacimiento de la fuerte alianza entre El Chapo Guzmán (Alejandro Edda) y El Mayo Zambada (Alberto Guerra) para consolidar y solidificar al Cartel de Sinaloa.

La presencia del siempre tóxico y prepotente agente de la DEA, Walt Breslin (Scott McNairy) perdido con esos sentidos torcidos del deber y la justicia. De su moral que únicamente delatan su clarísima incapacidad para establecer un marco real dentro de su vida y su actuar.

No habrá cuarta temporada de Narcos Mexico, Netflix lo confirmó a finales de 2021. Lo que ha pasado en los 20 años desde el momento en que cierra la tercera entrega, no son menos melodramáticas a lo que ya hemos visto e incluyen las sospecha de atentar en contra de dos secretarios de gobernación, de allanar el camino a candidatos afines a ellos y a negociar con todas las fuerzas políticas mexicanas nos confirman que material hay, pero también miles de dificultades y peligros y tal vez por eso haya sido cancelada.

Esperemos en unos años ver una cuarta temporada en la que veamos al menos el fin del Cartel Golfo y el nacimiento de los Z.

imagen: Netflix

miércoles, 26 de enero de 2022

Jaguar, la ficción española en buena forma.

 


 

Al estilo de Bastardos sin gloria, esta serie española nos cuenta una historia de búsqueda de Nazis en la España franquista que adoraba y protegió a los alemanes, fantaseando. 

Armando Enríquez Vázquez

Entre las series españolas estrenadas en Netflix en 2021, una de las más llamativa desde mi punto de vista es Jaguar producida por la empresa Bambú Producciones, creada por Ramón Campos uno de los importantes creadores de contenidos de la televisión española entre los que destacan las muy exitosas series; Gran Hotel, Las chicas del cable y otras que no son chick flicks como Fariña.

Jaguar es una serie de aventuras y sólo así se debe de ver, con una protagonista inverosímil en la España franquista de los años sesenta. Ubicada a principios de esa década cuando el asesino dictador Francisco Franco hacía de España uno de los países más pobres y sumisos del mundo, Jaguar cuenta la historia de Isabel Garrido (Blanca Suárez) una sobreviviente de los campos de concentración de la Segunda Guerra Mundial y que ha llegado a España buscando al Nazi que mató a su padre y se hizo cargo de ella. Otto Bachmann (Stefan Weinert) un ex comandante nazi radicado en la España Franquista y encargado de sacar ex militares Nazi de Europa rumbo a América del Sur.

La serie inicia cuando quince años después de terminada la guerra Isabel, una adulta joven, ha logrado infiltrarse en un restaurante alemán en Madrid, trabajando como mesera, donde Bachmann se reúne con un grupo de Nazis que se hacen pasar empresarios y están coludidos con las autoridades de la dictadura española. A punto de matar a Bachmann un grupo de españoles dedicados a descubrir a Nazis escondidos para entregarlos a la justicia internacional y que tiene conocimiento de que Bachmann está a punto de recibir a uno de los criminales Nazi más buscado, Aribert Heim, una especie de Mengele.

La célula está compuesta por Lucena (Iván Marcos), Sordo (Adrián Lastra), Marsé (Francesc Garrido) los tres sobrevivientes como Isabel de los horrores de los campos de concentración alemanes y el joven Castro (Óscar Casas), su padre fue compañero en el campo de concentración de Sordo y quien quiere vengar la muerte de su padre. Lucerna invita a Isabel a formar parte del grupo, que es financiado desde el extranjero y tiene como objetivo en ese momento atrapar a Aribert Heim, otro viejo conocido de Isabel.

La historia no es el melodrama clásico, se trata de una ficción histórica de esas tan de moda, sobre todo entre ciertas sociedades por borrar la triste historia real de su país y si Franco fue un carnicero dictador que mantuvo a España en la miseria, esa que provocaba a los países europeos a definir a aquella nación como el inicio de África, de la manera más despectiva y menos políticamente correcta dirían algunos hoy, la serie intenta reivindicar al pueblo español, despreciando a los militares que los sojuzgaron por más de tres décadas.

La historia es una de superhéroes civiles, sin poderes, pero con muy buenas secuencias de violencia y acción. Con personajes muy bien construidos. La actuación de Blancas Suárez como mujer de acción, fría y centrada en su venganza, es extraordinaria, el rostro impasible es igual a la de cualquier actor duro de este tipo de cintas, la convierte en una protagonista entrañable y verisímil, para los aficionados a este tipo de contenidos. Su pena y su dolor no son de lágrima fácil e historia chafa. Otro de los grandes personajes es Marsé. Estoico y escéptico. Que en uno de sus primeros diálogos cuenta un oscuro chiste sobre la ausencia total de Dios en los campos de concentración, encargado de la parte de conducir el auto del grupo descubriremos el peso de ese chiste y su dolor metafísico, porque Marsé era un sacerdote católico antes de la guerra, en el momento del inicio de la serie un ateo.

El ritmo de acción de la serie es muy bueno a pesar de tener los flashbacks tan en boga y que por lo general poco aportan a la narrativa de la historia. La historia consta de seis episodios en la primera entrega.

Jaguar, cuyo nombre hace referencia a una falsa historia de los guerreros jaguar y águila de la cultura mexica que Lucena le cuenta a Isabel, es una atractiva serie de aventuras. Para los que le encantan las historias basadas en hechos reales, por favor absténganse, esta serie es tan ficticia como el Capitán América.

A pesar del clarísimo Cliffhanger al final de la primera temporada, Netflix no ha anunciado aún una segunda temporada. En caso de que la haya espero que los productores no se engolosinen en guiones pedestres que sólo insultan a la audiencia como ha sucedido en el caso de La Casa de Papel, o de Sky Rojo de las que todos esperábamos mucho más.

Al final de la primera temporada Isabel adopta el sinónimo Jaguar para identificarse.

La secuencia de créditos de inicio es una muy buena animación con una canción del grupo catalán Ebri Knight, basada en los versos del gran poeta Miguel Hernández: Los vientos del pueblo.

publicado en octubre de 2021 en roastbrief.com.mx

imagen Netflix

viernes, 21 de enero de 2022

La clase 2021 del Salón de la Fama: Tom Flores

 


Hijo de trabajadores agrícolas indocumentados, Tomás Flores hizo historia en la NFL al conducir al equipo con reputación de rebeldes nueve años y en dos ocasiones a ganar el Vince Lombardi.

Armando Enríquez Vázquez

Inició una serie de textos sobre algunos de los jugadores, entrenadores y hombres del futbol que fueron electos en 2021 al Salón de la Fama del Futbol americano profesional, y quiero empezar con el primer entrenador mexico-americano en ganar el Super Bowl, cosa que además hizo en dos ocasiones. Tom Flores.

Seguramente muchos lo recordamos en las laterales del campo de futbol en Oakland dirigiendo a los Raiders y ganando esos dos títulos del futbol americano con los malosos. La mayoría de las veces con un suéter cerrado de cuello en V negro y con el logo de la franquicia.

Pocos saben que Flores y los Raiders tienen una relación que se remonta al nacimiento del equipo y que el primer quarterback de los Raiders fue Flores y por supuesto fue quien inicio el primer partido de la historia de los Raiders en esa posición con el número 15 en el jersey.  

Aún más, Flores junto con Mike Ditka son los dos hombres de la NFL que han ganado anillos de Superbowl como jugador, entrenador asistente y Head Coach. Su historia y reconocimiento son también clara muestra del racismo norteamericano contra los descendientes de mexicanos y el pavor que les da a blancos y negros el reconocer que la primera minoría de ese país está constituida por los descendientes de mexicanos, sea por migración o por la invasión norteamericana de los territorios que pertenecían a México en el siglo XIX tras la independencia de México y que los convirtió a la fuerza en ciudadanos de segunda en su propia casa.

Los padres de Tom Flores, originarios de Chihuahua, migraron a Estados Unidos para convertirse en trabajadores agrícolas. Tomás Raimundo Flores nació en Sanger, un pequeño pueblo en el centro del estado de California, el 21 de marzo de 1937.

Conforme al discurso que Flores dio en agosto de 2021 al momento de ser admitido en el Salón de la Fama del Futbol Americano Profesional, jugó futbol desde la secundaria en Sanger, más tarde en la preparatoria jugó para Fresno High College y finalmente consiguió una beca para jugar con College Pacific in Stockton y antes de terminar su carrera y después de tratar de ser parte de la NFL o de la liga canadiense, Flores recibió una oferta de una nueva liga en formación la AFL y en una franquicia establecida en la ciudad portuaria de Oakland. Los Raiders de Oakland pretendían competir con el equipo de la NFL que tenía su sede del otro lado de la bahía en San Francisco, desde un inicio los Raiders fueron un equipo que se identificó con los trabajadores del puerto, una clase media de obreros que difería de los intelectuales y trabajadores de cuello blanco de la ciudad importante de la zona.

Tom Flores se convirtió en 1960 en el mariscal de campo de una nueva franquicia, en la nueva liga y durante las primeras dos temporadas fue el titular de los Raiders, Flores se convirtió en el primer quarterback titular mexico-americano en la historia de la AFL. En 1963 retomó su puesto titular que conservó hasta la temporada 1966. En 1967 pasó a la franquicia de los Bills de Buffalo donde a pesar de ser el quarterback suplente jugó en los 14 juegos de la temporada e inició 3 de ellos. En 1968 con los Bills sólo jugó en una ocasión y en 1969 Flores jugó 2 encuentros con la franquicia de la ciudad de Buffalo y en plena temporada fue transferido a los Jefes de Kansas City donde participó en otros 5 encuentros, ese año los Jefes ganaron el Super Bowl IV a los Vikingos de Minnesota y esto le dio su primer anillo de Super Bowl a Tom Flores, ese fue el año en que terminó la carrera como jugador de Flores.

A lo largo de nueve temporadas, inició en 68 encuentros y participó en 106, lanzó para 11, 059 yardas, 93 touchdowns y fue interceptado en 92 ocasiones. Corrió 307 yardas en 82 carreras y anotó 5 touchdowns por tierra.

Flores comenzó entonces su carrera en las laterales del emparrillado como entrenador asistente primero en los Bills de Buffalo como entrenador de quarterbacks en 1971 y un año después en los Raiders de Oakland bajo el comando de otra leyenda del futbol americano John Madden al que había conocido en sus años como jugador cuando Madden era el entrenador de Linebackers de los Raiders. De 1972 a 1978 Flores fungió como entrenador de receptores. En 1977 recibió su segundo anillo de Super Bowl cuando los Raiders ganaron XI a los Vikingos de Minnesota. En 1979 con la salida de Madden del equipo, Al Davis, nombró a Flores como el nuevo Head Coach de los Raiders. Flores dirigió a los malosos a lo largo de 9 años y los vio mudarse por primera vez de Oakland a Los Ángeles. A lo largo de esos 9 años Flores ganó 83 juegos y perdió 53. Logró llevar a los Raiders a ganar sus otros dos Super Bowls el XV y el XVIII. El primero en 1981 en contra de las Águilas de Filadelfia y el segundo en 1983 frente a los Pieles Rojas de Washington.

Flores, como sucedió con su carrera como jugador, terminó su historia en la NFL lejos de los Raiders. 1987 fue su última temporada al frente de los malosos y en 1992 regresó al futbol americano como entrenador en jefe de los Halcones Marinos de Seattle puesto que ejerció a lo largo de tres temporadas. Al finalizar la temporada de 1994 Flores se retiró del futbol americano.

Tom Flores rompió muchas barreras en el futbol americano y sin duda es uno de esos grandes talentos poco reconocidos o recordados, afortunadamente en 2021 fue electo miembro del Salón de la Fama del Futbol Americano Profesional.

imagen: raiders.com

jueves, 20 de enero de 2022

Berrinche y Rabia



Pocas veces tenemos la oportunidad de ver como es la televisión checa, aquí la reseña de dos extraordinarias series de esa nación que puedes ver en Amazon Prime.

Armando Enríquez Vázquez

Siempre me ha gustado ver más allá de la narrativa y propuestas temáticas del cine, la televisión y la literatura norteamericana, que muchas veces resultan melodramas chabacanos y muy mediocres. Moralmente correctos y muchas veces con cierta violencia aséptica. Las serie y libros del Noirdic, las narrativas orientales, las series españolas, argentinas y hasta alguna de las mexicanas van un poco más allá en cuento a su retrato de la sociedad.

Las películas y, ahora las series, de lo que fue alguna vez la Europa comunista siempre han llamado mi atención por lo sobrio y gris de sus fotógrafos, con algunas excepciones y por sus historias tan “sal de la tierra”, su humor seco y a veces incomprensible para nosotros, así como su freca pero cruda narrativa. Por eso la llegada de dos series checas a la plataforma de Amazon Prime me entusiasmo y no me decepcionó.

Inmersos en la globalización de las historias de corrupción, narcotráfico, violencia y asesinos seriales Rapl y Vzteklina son un par de propuestas que llegan desde una parte de Europa que no es la rica y destellante Inglaterra, Alemania, Francia, Italia, tampoco las refinadas y frías Suecia, Noruega o Finlandia, por lo mismo nos vuelve a una sociedad más parecida a las nuestras en América Latina, menos tecnológica y con ciertas herencias de cuarenta años del totalitarismo comunista. De acuerdo con las aplicaciones de traducción el título de la primera significa Berrinche y la segunda Rabia, en Amazon Prime las encontraras como La Furia y Cuando cae la Noche, algo que respeta las leyes de la libre traducción en los títulos de películas y de series que son dictadas quien sabe por quién, pero tan respetadas por lo menos en nuestro país. Ambas series fueron producidas por la Ceska Televize, la empresa pública de la Republica Checa y ambas fueron exhibidas en su país de origen antes de la pandemia.

Rapl (2016-2019) cuenta con dos temporadas y fue un éxito en la televisión checa. La serie es una colección de personajes deleznables, tanto criminales, como policías, empezando por el protagonista de la serie el Mayor Kunesh (Hynek Cermac), un detective que después de golpear al novio de su ex esposa, es enviado como castigo de Praga al pueblo de Jáchymov al norte del país y en la frontera con Alemania. El trabajo policial en la localidad es deficiente y los agentes dirigidos por el prepotente y poco confiable teniente coronel Rohan (Alexej Pysko) que dirige una comisaría que ha sido infiltrada por el crimen organizado, además Rohan da un gran poder a su hermano Lucas (Miroslav Etzler) quien sin ser policía entra y sale de la oficina de su hermano. Al final de la primera temporada resulta ser narcotraficante que se ha aliado con el serbio Zeljko Cubric (Ivo Trajkov), y que sirve como trama de enlace con la segunda temporada en la que Rohan obsesionado con el narcotraficante y su posible escape de la prisión consigue que lo transfieran junto con todos sus detectives a la ciudad Usti nad Labem cercana a la prisión donde se encuentra Zeljkov y al cual Rohan quiere mantener vigilado. Kunesh de regreso en Praga que se encuentra sin trabajo, haciendo de investigador privado es enviado de vuelta al equipo de Rohan al que tiene como misión vigilar y cuidar. La serie que es un spinoff de una serie de 2013 llamada Cirkus Bukowski en la que uno de los personajes es Kunesh. La furia como fue bautizada la serie en español es un mosaico de perdedores, de gente rota investigando a gente aún más rota. La construcción de la gran historia a lo largo de la primera temporada es muy estudiada y desarrollada en un crescendo lento; descubrir las verdaderas intenciones de Lucas se da en los últimos episodios, pero el desarrollo y planteamiento del personaje nos ha dado pistas de su actividad ilegal a lo largo de la serie. La corrupción al interior del precinto policial, los odios y envidias entre los compañeros policías. Temas como el alcoholismo, el machismo y la discriminación de género son una constante presente en la serie y diferentes personajes de la misma lo hacen evidente, hasta llegar a Rohan en la segunda temporada donde se ha desecho de su esposa y tiene como amante a su secretaria y que en su obsesión por vigilar al asesino de su hermano se ha convertido en alcohólico. El desenlace final de serie es congruente con el carácter justiciero de Kunesh. La serie oscura y pesimista nos lleva en sus temporadas a través de un sistema de justicia fallido, como en todo el mundo, cuando tiene que enfrentar a los abogados corruptos y los negocios del crimen organizado como el narcotráfico y la trata de personas, policías que caen en sobornos, soplones y venganzas que sólo se pueden eliminar de raíz. Rapl es una serie dura sin matices moralistas, únicamente un retrato del momento global.


 



Por su parte Vzteklina es una extraordinaria miniserie de 6 capítulos en la que el veterinario Pavel Rogl (Kristof Hadek) llega a un pueblo de la región de Sumava Bucina, unos días después de un la bnrutal muerte de unos viejos cazadores. Rogl busca saber si en el bosque que rodea al pueblo hay animales salvajes con rabia. La historia de Vzteklina es un thriller, una historia de amor y una venganza. Una historia que recupera las historias de sangre posteriores a la II Guerra Mundial y que el comunismo oculto.

Como en el caso de Rapl, la acción se lleva a cabo en el norte de la República Checa, en la frontera con la actual Alemania donde alemanes y checos convivieron, se discriminaron y asesinaron al calor de pugnas ideológicas que hicieron desaparecer pueblos enteros con la traza de fronteras tras el conflicto armado.

En el pueblo Rogl encontrará a Gabriela Buresova (Johana Matouskova), un viejo amor y que es la hija del único sobreviviente de la masacre y al que los descendientes de los otros viejos y la policía local tienen como principal sospechoso de los asesinatos y que ha sido internado en una clínica psiquiátrica debido al fuerte shock que lo mantiene en un estado de silencio total. Los animales con rabia comienzan a aparecer por el pueblo y existe la sospecha de que un animal que ya extinto en esa región de Europa sea el causante de la muerte de los viejos. La hermana de Gabriela, Tana (Gabriela Heclova) será clave también para descubrir al asesino y sus motivos. Tras el asesinato del viejo terrateniente Pudil, padre de su novio, Tana descubre una serie de viejas fotografías que desaparecen de pronto. Tana logra quedarse con una y busca la historia de las personas que aparecen en la fotografía en los archivos locales.

La policía local, que parecen sacados de una comedia negra o de un relato de Ibargüengoitia, actúan con base a los descubrimientos del veterinario que los hace valorar la idea de que la rabia, en una zona en libre de esta enfermedad, ha sido inoculada en animales para ocultar al asesino que sin embargo deja ciertas pistas en los cuerpos de sus víctimas.

Vzteklina es el retrato de la vida de un pequeño pueblo, con sus intrigas, sus celos, sus infidelidades y las inquinas. Un guion previsible al final porque en un universo pequeño los sospechosos que van quedando conforme avanza la trama nos llevan a la conclusión lógica antes de que esta suceda, pero sólido y lleno de personajes entrañables y otros desagradables, con ironía, ternura, rigor en sus puntos de tensión, y una buena dirección con buenos actores. Vzteklina cuenta con 6 episodios que cuentan una muy buena historia y vale mucho la pena ver.

publicado originalmente en roastbrief.com.mx en agosto  de 2021.

Imagénes de AmazonPrime

martes, 18 de enero de 2022

Los autos de renta.

 


Una de las más conocidas empresas dedicada a la renta de automóviles se fundó en Chicago en 1918 y hoy existe en casi todo el mundo.

Armando Enríquez Vázquez

Hoy que estamos hablando de autos híbridos, eléctricos, autónomos, sin conductor y sobre todo acerca de la necesidad de reducir los parques vehiculares en las grandes ciudades a partir de formas alternativos de transportación como bicicletas y motocicletas, un excelente tranporte público, incluso la necesidad del uso de autos compartidos a la manera de las bicicletas que proporciona el gobierno de la CDMX, esta es una historia que resulta interesante y actual.

La idea surgió al popularizarse los autos a principios del siglo XX. Walter L. Jacobs nació en 1896, su padre se dedicaba a rentar un pequeño carruaje, cuando Jacobs tenía 20 años se convirtió en concesionario de autos usados de Ford. Dos años después Walter decidió crear un negocio al que sus amigos y conocidos le auguraron un fracaso. Walter pensó en la importancia de rentar automóviles para turistas y hombres de negocios, sus amigos dijeron que los autos iban a resultar con daños constantemente y las reparaciones harían que el negocio no fuera rentable.

El negocio inició en 1918 con el nombre de Rent-A-Ford, pues el negocio contaba con 12 modelo T. Rápidamente la empresa cambió de nombre por el de Rent-A-Car. En un principio Jacobs cobraba 10 dólares al día y el cliente podía manejar el auto por hasta 100 millas sin cargo extra.

El negocio resultó un éxito, los autos fueron cuidados por los clientes, y Jacobs expandió su flotilla de autos a 20 en el primer año, cinco años después en 1923 el negocio de Jacobs contaba con 565 autos y facturaba anualmente más de un millón de dólares.

John D. Hertz nació en el Imperio Austro-Húngaro, en lo que es hoy Eslovaquia en 1876, con el nombre de Sandor Hertz. Cuando tenía 5 años su familia emigró a Estados Unidos. En su adolescencia se dedicó al boxeo, después comenzó a trabajar en un periódico local en Chicago y pronto se convirtió en reportero del medio. Al perder su empleo como periodista, se dedicó a vender automóviles y después creo una empresa de taxis económicos a la que llamó The Yellow Cab Company, con el paso de los años franquició la empresa a lo largo y ancho de Estados Unidos, se dedicó también a fabricar automóviles para taxi y carretas. Pero Hertz ambicionaba más y pensó en un negocio de renta de automóviles y en 1924 compró a Jacobs su empresa con la idea de convertirla en una empresa de carácter nacional. Jacobs mantuvo un puesto directivo en la nueva empresa que en un principio se llamó Hertz Drive-Ur-Self Corporation.

Una vez consolidada la empresa, Hertz la vendió en 1926 a General Motors, fue bajo los años de General Motors que Jacobs como el encargado de las operaciones de la empresa abrió la primera sucursal de Hertz en un aeropuerto, también creó un sistema de tarjeta prepagada de renta de autos y el servicio de renta, sin tener que regresar el auto a la oficina donde se originó la renta. En 1938 Hertz abrió sucursales en Canadá y en 1950 la primera sucursal en Europa abrió en Francia.

En 1953, después 17 años, John Hertz recuperó Hertz comprándosela a General Motors a través de una empresa llamada Omnibus. Entonces se crearon programas de expansión y de recuperación de sucursales que GM había vendido a diferentes empresarios independientes a lo largo de Estados Unidos, para 1955 Hertz tenía 1000 puntos de renta y se convirtió en la primera empresa   de renta de automóviles en el mundo en lograr esta meta. Cuando Hertz compró de nuevo la empresa formó la Hertz Corporation. En 1954 Hertz Corporation comenzó a cotizar en la bolsa neoyorquina.

John Hertz murió en 1961, Jacobs que se retiró en 1960, se mantuvo en el consejo de la empresa hasta 1968. Jacobs murió en 1985.

 En 1961 se abrieron las primeras oficinas de renta en Latinoamérica. En 1967 Hertz pasó a ser una subsidiaria de RCA, en 1985 se vendió la empresa a UAL Corporation, dueña de la línea aérea United, que a su vez vendió la empresa dos años después a una subsidiaria de Ford Motor Company, que mantuvo la empresa hasta 2005 cuando la vendió a un grupo de empresas incluidas Merryll Lynch y Clayton, Dubilier & Rice quien eventualmente se hizo de la totalidad de Hertz en 2006.

En 2002, cuando todavía era propiedad de Ford Motor Company, Hertz se convirtió en la primera empresa de renta de automóviles occidental en abrir una oficina de renta en China. A lo largo del siglo Hertz a unido a su grupo a diferentes empresas de renta de automóviles como Dollar, Thrifty y además posee otras empresas como Rent2Buy.

En 2020, y como consecuencia de la pandemia de Covid19, en mayo Hertz se declaró en bancarrota y lleno el famoso capítulo 11 de la ley norteamericana para empresas quebradas. En julio de 2021 Hertz salió de la bancarrota y en noviembre de ese mismo año comenzó a cotizar de nuevo en NASDAQ.

Hertz se esta modernizando y piensa cambiar toda su flotilla de autos por automóviles eléctricos en especial por autos Tesla.

Publicado originalmente en thepoint.com.mx

Imagen: hertz.com

miércoles, 12 de enero de 2022

Nerd today. Boss Tomorrow.



Como vender drogas por Internet de manera rápida es otra gran serie alemana, maravillosamente escrita, dirigida y actuada. Humor negro en un hibrido de comedia, thriller y melodrama. Y esta es su tercera temporada.

Armando Enríquez Vázquez

Esta es una de las frases con las que inicia la serie alemana Cómo vender drogas por Internet de manera rápida y una utilizada cerca del final de la tercera temporada que se acaba de estrenar en Netflix. Una frase llena de arrogancia y dolor que refleja a las últimas generaciones de jóvenes que se sienten incomprendidos en sus años de educación preparatoria y secundaria.

Así bajo ese leitmotiv se desarrollan tres temporadas de desaventuras del adolescente Moritz Zimmermann (Maximilian Mundt), quien al final de la tercera temporada alcanza la mayoría de edad y en la que finalmente Moritz acepta su personalidad egocéntrica y egoísta. Ayudar a aquellos que los consideran por momentos su amigo, es solo otra expresión de esa personalidad. Moritz va en camino de convertirse por su propia voluntad y por azares del destino en un Padrino alemán

No hay nada nuevo ni sorpresas en la serie; sabemos que Moritz esta en la prisión y hace tres temporadas nos cuenta la historia de su negocio de drogas por Internet en un testimonial que está siendo grabado para la televisión alemana, lo único que crece en el relato de Moritz es demostrar ambición por mantener su exitoso negocio y satisfacer su ego al mostrarse como un triunfador.

La tercera temporada inicia con Lenny (Danilo Kemperidis), Dan (Damian Hardung) y Kira (Lena Urzendowsky) tras ser traicionados por Moritz, desarrollando su propia página para vender drogas, mientras Moritz trabaja en Holanda con Marlene (Markoesa Hamer) y Beeke (Hannah van Luteren), pero sigue acudiendo a la escuela en Rinseln, Alemania, donde sigue siendo ignorado por todos y ahora despreciado por los que constituían su núcleo de amigos y conocidos, con excepción de Lisa (Anna Lena Klenke) su antigua novia y buena amiga. Ahora los problemas de Moritz se centran en desarrollar una nueva página de Internet mejorada y a la que Leny no pueda tener acceso, ni conocer cómo funciona del todo y con la que impresionar a las holandesas, pero el genio de la programación no es Moritz sino Lenny.

Las holandesas junto con Marteen (Ruben Brinkman), el sicario del trío, tienen planeado quedarse con el negocio y utilizar a Moritz como la fachada y en su momento sin duda como chivo expiatorio de la operación.

El inspector Kamper (Florentin Will) sospecha ya de Moritz y a pesar de ordenes directas que se lo prohíben continúa investigando a Moritz. El núcleo familiar de Moritz continua igual; el padre Jens (Roland Riebeling) sigue tratando de mantener a la familia unida y demostrar que es un buen padre a pesar de no ser un buen profesional y las palabras de Moritz acusándolo de ser un fracasado resuenan en su mente a lo largo de la tercera temporada, pero su amor paternal esta por encima de los reclamos Moritz y la pequeña María Zimmermann continua su exitosa carrera como tik toker.

Como vender drogas por Internet de manera rápida es otra gran serie alemana, maravillosamente escrita, dirigida y actuada. Llena de humor negro, de emoción en un hibrido de comedia, thriller y melodrama, con giros de tuerca inteligentes y un final de la tercera temporada más que predecible, con personajes entrañables y un protagonista bastante repulsivo. Personajes adolescentes que se comportan como tales y villanas corporativas que no se ensucian las manos, para eso tienen a su matón, mientras ellas son agradables, sofisticadas y divertidas. Policías torpes, empecinados y enamorados de ellos mismos. La familia Zimmermann cliché de una familia kitsch y el propio Moritz atrapado entre querer dar la imagen de un empresario de tiempos del Internet y al mismo tiempo un inseguro adolescente que no puede entender que Lisa ya no lo quiera y se dedique a explorar su sexualidad con otros jóvenes que no son él. Al final Lisa también traicionara la confianza que Moritz le tiene en aras de satisfacer sus propias aspiraciones. Como vender drogas por internet de manera rápida es un buen retrato de una generación de influencers y jóvenes banales, egoístas que con sus caprichos e intolerancia imponen tendencias de mercadotecnia y de pensamiento no reflexionado. Valientes detrás de sus teléfonos y teclados inseguros al enfrentar la vida real como el personaje de Kira.

El resultado es muy atractivo, el formato con temporadas cortas de 6 capítulos de media hora ideal y todos listos para una cuarta temporada en la que creemos que Moritz escapará de la cárcel, para continuar su ascenso de Nerd a Jefe de jefes.  


Originalmente publicado en roastbrief.com.mx en septiembre de 2021

Imagen Netflix

miércoles, 5 de enero de 2022

El Cid; segunda entrega.

 


La historia del Cid en la segunda temporada se ve entre su fidelidad a Sancho, la promesa de Fernando I de León por convertirlo en Conde y la consciencia de salir del vasallaje para ser dueño de su destino.

Armando Enríquez Vázquez

Crear una serie dramática basada en personajes históricos, tiene dos posibilidades de desarrollo a grosso modo. La primera recrear de manera lo más apegado a los hechos conocidos y documentados posible y entonces los españoles han creado una serie histórica como Isabel. La otra construir a partir de fragmentos de historia y los hechos conocidos de los personajes históricos, pero creando escenarios y situaciones totalmente ficticios para contar o reflejar un momento histórico o una cultura como sucede en el caso de Vikingos de History  Channel.

Amazon Prime estrenó la segunda temporada de El Cid. Cinco nuevos episodios donde se cuenta la relación del Cid (Jaime Llorente) con el rey Sancho II de Castilla (Francisco Ortiz), optando por un hibrido de las dos anteriores tomando personajes conocidos y cuya existencia se conoce y documenta en la historia de España Medieval con otros, producto de la mente de los creadores de la serie Luis Arranz y Angel E. Pariente de la misma manera que muchas situaciones que sirven para construir esta ficción histórica en tono de un melodrama lleno de lugares comunes. Las intrigas palaciegas, en los últimos años tan explotadas por Game of Thrones, se asientan a partir del núcleo familiar de los herederos del rey Fernando I y su lucha por egoístamente reunificar el reino partido a la muerte de su padre: Castilla quedó al mando de Sancho, León de Alfonso (Jaime Olias) y Galicia de García (Nicolás Iloro). Sancho se siente por ser el primogénito varón con derecho a todo y Urraca se siente con derecho a todo por ser la primera hija del rey.

La historia del legendario héroe español se encuentra en esta segunda temporada enclavada en su fidelidad a Sancho, la promesa de Fernando I de León por convertirlo en Conde y con ello darle la oportunidad de acceder a la mano de Jimena (Lucía Guerrero) y una consciencia de salir del vasallaje para convertirse en el dueño de su destino.

Como en el caso de las producciones españolas de género histórico, no existe una producción deslumbrante en el sentido de efectos especiales, o escenografías deslumbrantes con excepción de los palacios de los conquistadores árabes.

Esta segunda temporada más delimitada por la historia documentada del personaje principal y de los hechos de los reyes Sancho II de Castilla y Alfonso VI de León, parecería que daría menos libertad fantasiosa a los escritores, pero personajes como Urraca de Zamora (Alicia Sanz), se siguen desarrollando de una manera que no esta documentada en la historia y sí en la primera temporada se vuelve la mano que envenena a su padre, Fernando I, en la segunda temporada elimina de manera accidental a su madre la reina Sancha (Elia Galera) algo totalmente falso. El guión utiliza las supuestas relaciones incestuosas con su hermano Alfonso VI, para crear una especie de Cersei Lanister española. Urraca ambiciosa y maquiavélica no duda en unirse con el clérigo Don Bernardo (Juan Echánove) que ya desde la primera temporada es un clásico ejemplo del cura entrometido y parte de un poder factico que no duda aliarse y conspirar usando los nombres de Dios y del Papa, pero buscando su propio beneficio y afinidades.

Los guionistas decidieron mantener a dos antagonistas, Además de Urraca, al infame y poco importante personaje de Orduño (Pablo Álvarez) el prometido de Jimena, la histórica y futura, en la series, esposa de el Cid, e hijo del traidor Flain (Carlos Bardem), asesinado por el abuelo del Cid al final de la primera temporada, es una verdadera piedra en la historia y poco o nada aporta a la historia, porque el personaje no está desarrollado y nunca pasa de ser un cobarde, ladino a lo largo de 10 episodios. Urraca por el contrario es un personaje complejo, muy bien escrito y mejor interpretada. Lo que parece poco lógico porque a diferencia de Urraca de Zamora que es un personaje histórico, Orduño es una invención de los guionistas que pudo haber tenido una mayor riqueza al no estar acotado por textos históricos.

La desaparición de personajes inútiles como el abuelo del campeador y la madre que hacen perder minutos de la narrativa, nos quitan pesos muertos en vista a una tercera temporada.

Las influencias de otras series como queda asentado arriba son claras y la estructura es la de una telenovela de Televisa, no existe ningún documento o fuente que diga que Jimena estuvo comprometida con otro que no fuera el Cid, sin embargo, dudas, rencores y celos que sufre la joven cortesana son el motor para poner cierta tensión en una relación que todo mundo sabe cómo termina y sólo estamos esperando en que temporada desaparecerá o caerá muerto ese ficticio estorbo que resulta Orduño.

Amina (Sarah Perles), la mora enamorada del Cid es otro personaje creado por la imaginación de los escritores de la serie y que funciona para puntear las emociones tanto de Jimena como de Ruy Díaz en ese amor imposible que define a los personajes en la serie. Pero además a diferencia de Orduño muestra cambios no sólo producto del despecho que sufre, sino al ser una paria al interior de la comunidad mozárabe, lo que la obliga al autoexilio. Puente entre los árabes y los españoles al ser convertida en rehén de Sancho, Amina termina caminado los caminos de Castilla para buscar refugio en Toledo.

Como las referencias históricas a la esposa de Sancho, Auduberta o Alberta (Amparo Alcaraz), son pocas la construcción del personaje al interior de la serie histórica resulta débil y muy menor. Lo mismo sucede con el dibujo de Vellido al final de la segunda temporada y quien de acuerdo con ciertos documentos es el autor de la muerte de Sancho y al que sin duda volveremos a ver por lo menos en el primer episodio de la tercera temporada.

La serie es muy dominguera, pero al sólo constar de 5 capítulos por temporada funciona bien para un fin de semana de ocio con semáforo naranja.

publicado originalmente en roastbrief.com.mx en septiembre de 2021

imagen Amazon Prime.

martes, 4 de enero de 2022

Los medios y su versión de periodismo en picada

 


¿Dónde quedaron los noticieros e informativos de radio y televisión? El servilismo político y la mezquina voracidad por comercialización los acabaron.

Armando Enríquez Vázquez

¿No se cansaron ya de que en algún momento en cualquier noticiero de radio o televisión los conductores o periodistas digan: ¡Hoy estamos cargados de noticias!¡Hoy si tenemos mucha información!

Para empezar como oyente o espectador eso es precisamente lo que espero de un noticiero, que me llene de información y no de entrevistas o comentarios de los conductores o con columnistas de diarios, amigos o personas puestas a fuerza en los espacios para opinar desde una visión de dudoso origen en el mejor de casos. La promoción de ideas desde una supuesta objetividad o lo que resulta peor para que intenten venderme algún producto a partir de supuestas entrevistas.

Para seguir un noticiero debe ser conducido por periodistas o gente muy informada como sucedía con José Gutiérrez Vivó o sucede en la actualidad con Leonardo Curzio, Pedro Ferriz de Con o Carmen Aristegui, para poner ejemplos en todo el espectro ideológico de la radio, porque el sistema en televisión sabemos que no funciona ya. En el radio tristemente comienza a gastarse de la misma manera.

La responsabilidad del titular de un espacio informativo no se limita a ser carismático o tener chispa, se debe fundamentar en una amplia cultura general que le permita poner en contexto la noticia. Que le evite decir incongruencias al aire, como hay muchos en la actualidad en especial en las jóvenes televisoras como Imagen, donde han creído que Yuriria Sierra una mujer prepotente e ignorante o en la radio donde Javier Risco ha confundido lo coloquial con lo chistoso sin ser Brozo o Chumel.

En los años setenta los noticieros, incluso los parciales y manipulados informativos de Televisa, estaban llenos de información, nacional e internacional. A partir de los años noventa los noticieros siguieron el ejemplo norteamericano y se volvieron ombliguistas y con los años se han convertido en show de la nota roja, porque así ayudan a los centros de poder a crear una sociedad poco crítica, miedosa, medrosa y que entiende la noticia como un escape a su morbo y justificación de sus odios.   

La inmediatez y el ego de los conductores dominan los espacios de los medios tradicionales y de manera altanera y pomposa se han dedicado a creerse y tratar de hacer creer a las audiencias en su papel como miembros de una inventada comentocracia, palabra que en realidad no significa nada y que carece de valor en el momento en que de dejan de predicar desde ese falso pedestal que han construido con su jactancia. La autoridad y guía del que comenta o analiza una noticia termina en el momento en que la censura del Estado entra en acción sin importar el color del gobierno; lo vimos con la derecha del PAN en el caso de Aristegui y Calderón y lo volvimos a ver al siguiente sexenio con la misma conductora y Pedro Ferriz de Con censurados y despedidos de sus fuentes de empleo por Peña Nieto y lo vemos este sexenio a diario con la intolerancia y el odio del presidente a quienes critican y cuestionan su gobierno. En el mejor de los casos para ellos ese fama y falsa idea de importancia termina cuando el segundero marca el fin del programa o en el momento en que los anunciantes desisten de promover sus productos en ese espacio o medio.

El problema es que el problema esta tan enquistado ya en la agenda de los dueños de los medios, serviles al poder o cómplices de él, que desde hace décadas las fake news en México provienen de la mayoría de los medios, lo que muchas veces “se descubre” al finalizar el sexenio y entonces queda clara la realidad de los fracasos de los gobiernos y la corresponsabilidad de los medios que al tener otro amo se desbocan en críticas y ataques contra lo que encubrieron por seis años. Por eso da risa cuando esos que se creen una especie de clase informada que pretende dar a conocer lo que sucede en México y el mundo se atreven a hablar de los peligros de las fake news en Internet cuando casi todos ellos esparcen sólo la visión de los dueños de las cadenas televisivas o radiofónicas que se cimientan la mayoría de las veces en sus aspiraciones a favores y concesiones del gobierno en turno, el ejemplo más importante en durante décadas ha sido el del grupo radiofónico Radio Centro de la familia Aguirre que nunca ha podido sostener un canal de televisión y que durante el pasado sexenio hizo el ridículo a nivel empresarial al comprar un canal y después desistirse de la compra por falta de capital. Dicho grupo gracias a lamer la mano del presidente López Obrador vuelve a tener la oportunidad de operar u n canal de televisión que nadie ve por lo sesgado de sus informativos.

La culpa no la tienen los medios, ni sus dueños, ni los mal llamados periodistas. La culpa es totalmente de nosotros que seguimos prendiendo sus canales, sintonizando sus frecuencias o comprando sus ediciones, como si nada.



La fotografía es de mi autoría

lunes, 3 de enero de 2022

Todos los deportes a la plataforma continental




Capacidad y posibilidad de complacer a las diferentes aficiones con respeto de permitirle contemplar las competencias en su entera duración y no con tristes highlights. JO en Internet. 

Armando Enríquez Vázquez

Viernes 23 de julio de 2021 la visión obligada de la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 después del año de retraso impuesto por la pandemia. Lugar de observación; La smartTV, computadora, tableta o teléfono a tu alcance. La transmisión a cargo de Clarovideo.

Entender a los nuevos consumidores de deportes y crear los accesos para satisfacer la demanda es vital en el desarrollo de los nuevos negocios deportivos. Desde hace ya varias ediciones de los Juegos Olímpicos tanto de invierno como de verano Clarovideo se ha hecho de los derechos de transmisión en América Latina y utilizando la versatilidad del internet ha implementado varios canales para transmitir todos los eventos y dejar al espectador escoger la disciplina de su gusto.

La capacidad y posibilidad de complacer a todos las diferentes aficiones con el respeto de permitirle contemplar las competencias en su entera duración y no a manera de tristes highlights o seleccionando sólo aquello que se piensa les dará rating, hace que la propuesta de Clarovideo, asociado con el diario deportivo Marca va ganando cada día más adeptos a su cobertura de los eventos olímpicos. Lo más importante; audiencias a lo largo de América Latina no sólo en México.

Claro ha ido mejorando notablemente en la fuerza de su propuesta, ya en Tokio 2020 la mayoría de los conductores encargados de las competencias, dieron brillo a la transmisión y me recordaron a la vieja escuela que se preocupaba por hacer partícipe al espectador a partir de la idea sencilla y lógica de que de este lado del dispositivo somos neófitos totales de la disciplina que se ejecuta. Alejandro Cárdenas el corredor mexicano resultó uno de los mejores comentaristas deportivos que he escuchado en muchas décadas, ameno, conocedor, sencillo y empático en su explicación del deporte. Cárdenas debe ser tomado como un ejemplo para muchos en las pantallas de Imagen TV, Televisa, ESPN y otras empresas televisoras que únicamente saben pasear su ego frente a pantalla. Lo mismo sucedió durante las competencias de halterofilia donde la medallista olímpica Luz Acosta hizo una narración espectacular, en la que explicó el deporte al espectador aderezándola su narración con las leyendas y mitos del deporte, algo que le falló a Lorenza Morfín, ciclista elegida para narrar el deporte de la bicicleta BMX y que a pesar de demostrar su conocimiento sobre el deporte y su soltura en la conducción, se le olvido siempre que tenía del otro lado de la pantalla a una audiencia que carece de conocimiento del deporte, su abuso de los anglicismos fue una parte muy importante de una narración elitista y petulante que se le olvido que en muchos países de América Latina no son tan anglófilos como los mexicanos y sobre todo que no estaba en la sala de su casa con sus cuates, si no cumpliendo una labor de experta comentarista.

Claro en un gran acierto decidió incluir entre sus comentaristas a expertos colombianos, que hicieron un soberbio trabajo en ciclismo, argentinos y algún centroamericano como la nadadora costarricense Sylvia Poll, primera medallista para su país y para todas las naciones centroamericanas, lo que demuestra como Clarovideo ha entendido las bondades y alcance de las transmisiones en línea. La realidad de su audiencia continental por lo menos, pero de clara manera global. Si en México no se tiene una tradición o conocimiento de las reglas de deportes como el hockey sobre pasto, rugby, canotaje, entre otros Claro tomó la decisión correcta e incluyo a los conocedores sin importar la nacionalidad. La conducción celebró a todos y cada uno de los países latinoamericanos por igual. Otro acierto de la empresa.

La única falla atroz en materia de comentaristas fue la que se dio en clavados donde más valía ver las competencias sin audio a escuchar la torpe conducción de Jorge Álvarez que nunca brindó seguridad a los especialistas del tema Laura Sánchez y Jorge Carrión que se notaban totalmente fuera de cancha porque el señor Álvarez parece no saber nada del deporte que condujo y se limitó a pasar la palabra a los especialistas después de cada clavado, dejando su labor de conductor para ser un simple moderador.

Domingo 7 de agosto los juegos terminaron con una ceremonia excesiva, pero extraordinariamente conducida por Alberto Latti, Clarovideo demostró todo lo que ha aprendido a lo largo de sus aventuras en transmisión de estos tipos de eventos, y como sin importar lo que los canales de televisión abierta o de paga nos quieran decir con sus próximos desplegados de ratings, nadie puede por hoy y en los próximos ciclos olímpicos de invierno y verano desbancar a la empresa de internet que hoy por hoy no necesita de payasos y otras cosas para hacer una transmisión deportiva seria a la altura de un evento de trascendencia mundial.

En dos semanas Claro demostró, como la ha hecho desde hace unos años ya, la importancia de las audiencias globales y las plataformas multi canal, de cómo si hoy podemos hablar de un líder en el ramo deportivo es definitivamente la empresa de Slim.

Originalmente publicado en agosto 2021 en roastbrief.com.mx

sábado, 1 de enero de 2022

Librerías.

 


Más allá de su funcionalidad, la posibilidad de unir al libro con su lector como diría Borges, las librerías pueden llegar a ser bellas. Algunos establecimientos que recuerdo. 

Armando Enríquez Vázquez

Leo un artículo acerca de las librerías más bellas del mundo, un artículo que se ha vuelto lugar común en Internet. En diferentes portales es común encontrar este tipo de texto. En este publicado por The Financial Times, como siempre cada quien tiene sus favoritas y sus repetidas con otros recuentos similares, me sorprende encontrar por primera vez una librería mexicana; El Péndulo Cafebrería, y lo cierto es que la matriz en la calle de Nuevo León en La Condesa y la sucursal de Polanco son librerías hermosas en verdad. Con los años el Fondo de Cultura Económica ha construido al menos dos bellos espacios para sus clientes y lectores, el primero aprovechando la estructura de lo que fue alguna vez el Cine Lido, inaugurado en 1942 y diseñado por el arquitecto estadounidense Charles Lee en el más puro estilo art deco. En 2006 se reinauguró como un centro cultural que incluye la librería Rosario Castellanos del Fondo de Cultura Económica, el otro es el Centro Cultural Elena Garro en el centro de Coyoacán.

A lo largo de muchas décadas las librerías en México se transformaron de estanterías con libros donde a veces ni siquiera se podía observar los libros con detenimiento pues se estorbaba el paso de otros clientes en amplios espacios con sillones y lugares recreativos para los lectores más jóvenes.

En la década de los ochenta y noventa Gandhi era sin duda la mejor opción para buscar libros y LPs, sin embargo, era un infierno para buscar libros de manera azarosa. Los libreros a veces eran lo demasiado chaparros y obligaban al lector a buscar en cuclillas entre la oferta de libros obstruyendo a otros que tenían una idea más clara de los que buscaban o a los dependientes que siempre lo supieron todo acerca de la oferta editorial de la librería y de los autores que el lector buscaba. La mesa de ofertas era una enorme estructura al final del pasillo de entrada al local de Miguel Ángel de Quevedo. Los libros en centro eran inalcanzables para cualquier persona y la mesa limitaba el paso a quienes intentaban ver los libros en las estanterías atrás de la mesa.

El Parnaso en el centro de Coyoacán era la segunda librería en el sur de la ciudad. Mucho más espaciosa que Gandhi, y había una más en Insurgentes Sur, frente al Teatro de los insurgentes con su majestuoso mural de Diego Rivera que se llamaba El Ágora, en el centro de la ciudad se encontraban El Sótano y Porrúa, ambas restringían el paso al cliente y como en tlapalería una serie de dependientes atendían a los lectores desde un mostrador, algo que siempre odié.  Afortunadamente ambas han eliminado esa política que alejaba al lector del libro.

La cadena importante de librerías en la Ciudad de México era la Librería de Cristal que había por diferentes zonas de la ciudad y que por lo general estaban mejor planeadas para que el lector/cliente las caminara y revisara con calma los títulos en las estanterías. Pero la oferta no era la mejor y cerca del final de sus días eran visitadas únicamente en temporada de inicio de clases pues en ellas se encontraban todos los libros de texto de secundarias, preparatorias y universidades.

Había una librería en Plaza Universidad llamada Bibliorama que para la inculta clase media mexicana resultaba un extravagante local más, en una plaza del futuro donde lo que importaban eran los cines y locales deportivos y de ropa, que con los años desapareció para dar paso a una tienda de memorabilia de películas y programas de televisión, que ya también desapareció.

 Estas eran las librerías en las que me movía durante mi adolescencia y temprana juventud. Alguna vez me contaron de una librería en sobre avenida de los Insurgentes en la Zona Rosa, llamada Berlin que alguna vez pude ver desde su aparador porque por alguna razón que no recuerdo estaba cerrada.

También estaban las que visitaba de manera constante porque amigos míos trabajaban en ellas o en como en el caso de la Librería Bonilla, ubicada en esos años enfrente a la entra de la UNAM sobre avenida Universidad, la familia de mi amigo Juan Bonilla era la dueña. Actualmente es Juan quien dirige la librería que además tiene su editorial y cuyo local comercial se ubica sobre Miguel Ángel de Quevedo.

Otra librería que visité durante una temporada de manera constante fue El Juglar en la colonia Guadalupe Inn donde mi amigo José Manuel de Rivas trabajaba como dependiente en los lejanos años ochenta. José habría de morir en los años noventa de manera trágica.  

Fue también a mediados de la década de los años ochenta cuando descubrí las librerías de viejo y maravilloso arte del trueque, había una de estas librerías sobre Ave. Cuauhtémoc en las cercanías del Cine México, que además sobrevivió al terremoto de 1985 y en la que realicé este tipo de transacciones más de una vez. Las librerías de viejo que han proliferado son un gran lugar para perderse en ellas por horas buscando un libro que no te imaginas que existe o que quieres leer hasta que ves el título en el lomo entre otros miles de decenas de libros usados.

Con el tiempo he aprendido que las librerías de viejo son la mejor opción para los bibliófilos no sólo en la Ciudad de México, sino en las pocas ciudades del interior y del extranjero que conozco, porque no te apabullan con mesas de novedades donde un desconocido de 26 años y con una primera novela es comparado por el ambicioso y falaz editor con toda la obra de Chejov, Joyce y Proust  juntos, ni están llenos de libros lejanos a la literatura y más cercanos a la más ramplona crónica periodista, disfrazada y etiquetada como literatura por la editorial y los libreros.

En las librerías de viejo sin complejos de moda, ni trending topics uno puede perderse en pasillos de sencillas maravillas con encuadernaciones muchas veces dañadas.

imagen; fotografía de mi autoría.