martes, 25 de septiembre de 2018

Pasión por el color.




Una de las marcas más populares en nuestro país en materia de colorantes tiene una historia que se liga a momentos de migración.

Armando Enríquez Vázquez

1938 fue un año terrible, marcó el inició de uno de los periodos más negros de la Humanidad con la invasión de Austria y la preparación para iniciar en enero de 39 la de Checoslovaquia con los discursos difamantes de Göring sobre los checos y la terrible “Noche de los cristales rotos” donde los simpatizantes de Hitler quemaron 267 sinagogas, mas de 7000 establecimientos propiedad de judíos, arrestaron a más de 25,000 personas de esta religión y mataron al menos a 91 de ellos, todo esto auguraba la II Guerra Mundial, mientras que en España apoyadas por Nazis, fascistas italianos y con la bendición del Papa Pio XI estaban a punto de triunfar la tropas dirigidas por otro de los hombres más despreciables y sanguinarios del siglo XX; Francisco Franco, quien gobernaría España hasta 1975 en una dictadura europea digna de cualquier republica centroamericana. A pesar de todo esto una nota de color se dio en Francia con la celebración del III Copa Mundial de Futbol de la cual resultaría la selección de Italia la campeona.
Ese año un joven alemán de nombre Hans Georg Bürk-Ballier decidió abandonar la caótica e insegura Alemania y emigrar a México. De acuerdo con el relato del sitio de Internet de la marca, el padre de Hans Georg había emigrado a México años antes y en 1932 había registrado ya la marca Mariposa como un colorante para la ropa. Algún problema trajo al padre a México y al reunirse con el hijo por lo que se puede deducir del texto en el sitio de Internet de la marca, los problemas se volvieron a hacer presentes entre padre e hijo, lo que obligó al recién llegado a comprar la marca a su padre y comenzar la fabricación de los colorantes en su casa. La producción se llevaba a cabo por las noches y durante el día comenzaba a vender sus productos por las calles de la ciudad, encontrando en la tlapalerías y ferreterías su principal canal de ventas.
La primera presentación del producto fue en pastilla y después en polvo. Poco a poco Mariposa fue ganando terreno y fama, hace cincuenta años mas o menos el grupo creció y se convirtió en Grupo Colorim (Colores Importados) lo que le permitió incursionar en nuevos mercados como la fabricación de velas decorativas y cirios, de trampas de pegamento para roedores, un desodorante para cañerías y toda una línea de productos escolares, (Crayones, acuarelas, plastilinas y pegamentos) en su mayor parte agrupados en la marca Colorcitos. Así como de las marca que en un momento fue la competencia de Mariposa: Citocol.
Mariposa continuó y sigue siendo la marca principal del grupo.
La marca obviamente desde sus inicios se identificó con una mariposa como logo, mismo que se ha ido modificando con el paso de los años. Colorim tiene también como logo una mariposa. Sin duda, como un homenaje y una forma de relacionar de manera directa al corporativo con la marca que dio origen a todo.
En el sitio web de Mariposa se dice que Hans Georg Bürk-Bailler murió en 1987. Hoy la marca es líder en el mercado de colorantes para tela y es un referente de muchos hogares en los que teñir y reforzar los colores de las prendas y creaciones de las amas de casas, de los jóvenes es importante, pero también para artistas, artesanos incluso la marca tiene productos para teñir cemento.



Desgraciadamente la información acerca de una marca importante en la historia comercial de México y que tiene más de ochenta años de existir es muy pobre y una vez más muestra el desinterés por parte de los dueños de la marca, la cual tampoco sabemos si hoy en día sigue perteneciendo a la misma familia, por contar una historia a todas vistas de éxito, que inició con un joven que llegó con sueños a un país extraño y se estableció creando una marca referente y longeva en México.



imagenes colirim.com
                colorantesmariposa.mx

No hay comentarios:

Publicar un comentario