viernes, 27 de marzo de 2020

Ralph Bakshi y el comercial de Fanta




Dos reconocidos creadores se unieron a finales de la década de los años sesenta para crear un comercial para Fanta en el espíritu de la época.

Armando Enríquez Vázquez

Ralph Bakshi, el famoso cineasta y animador creador de la afamada película Fritz, el Gato, una de las películas animadas más controvertida, en sus días, en la que el personaje principal, un gato como lo dice el título, antropomorfizado, vive en el mood de la época, es promiscuo sexualmente y fuma marihuana. La película fue la primera de animación en recibir una clasificación X en Estados Unidos, categoría reservada a la pornografía. Bakshi es responsable también de un primer intento por llevar a la pantalla cinematográfica El Señor de los anillos en 1978 y que en 1992 realizó la extraña película Cool World que mezcla la animación con actores y que fue estelarizada por Brad Pitt, Gabriel Byrne y Kim Bassinger, Bakshi como tantos otros, también incursionó en sus primeros años en el mundo de la publicidad.
Otro de los grandes animadores norteamericanos, Peter Max, quién, aunque nacido en Berlin se estableció en su adolescencia junto con sus padres en Brooklyn, responsable de uno de los posters de la Copa del Mundo de Futbol de 1994 en Estados Unidos, así como de posters para diferentes ediciones del Superbowl, los Grammys, y de pinturas de famosos y socialites, incluyendo a la cantante Taylor Swift.
En sus orígenes ambos artistas gráficos coincidieron para llevar a cabo uno de los comerciales de televisión más groovie, palabra muy usada en la época de los sesenta en Estados Unidos para denotar, algo maravilloso, increíble y de moda, de la televisión norteamericana. Un comercial para Fanta.
Con colores puros y brillantes, una estética exagerada y psicodélica, una nave en forma de botella de Fanta, personajes vestidos a la moda de los años finales de esa década, estos dos hombres crearon un anuncio para el refresco Fanta que a principios de la década había sido introducido en el mercado norteamericano tratando de olvidar el pasado Nazi de la marca y el refresco que ahora era de naranja y no de lo hubiera a la mano. Las campañas de Fanta lo habían posicionado muy bien entre los jóvenes y ya en 1968, fecha del lanzamiento del comercial, era uno de los refrescos más populares en Estados Unidos.
Con duración de un minuto, una música conceptual en el principio en la que parece escucharse la palabra Fanta, para después convertirse en jingle común y corriente que con alegría resalta lo divertido que es tener sed cuando se tiene Fanta a la mano y se califica a la marca como: la fuente del sabor.
El comercial completo se puede encontrar en




imagen: nfsa.gov.au

No hay comentarios:

Publicar un comentario