jueves, 30 de julio de 2020

El pantano recuento de muchos daños



El Pantano es mucho más que una miniserie policiaca, es una reflexión acerca del daño que hicieron los gobiernos totalitarios a los individuos en aras del bien sectario. 


Armando Enríquez Vázquez

En el último año me he encontrado en Netflix dos series polacas que hablan de una manera u otra de ese terrible pasado sufrido por los polacos tras la II Guerra Mundial cuando quedaron bajo el yugo comunista de la Unión Soviética y el estado totalitario impuesto desde Moscú en que vivieron como las demás naciones de lo que se llamó Europa del Este donde lo que menos importaba eran la libertad y la individualidad, lo que salía a flote era la corrupción y un oprobioso sistema de privilegios y autoritarismo fascista como el que se vive hoy en Cuba y Venezuela.
La primera de ellas es 1983 en la que directamente se trata el tema de la libertad y la democracia denegada a través de un sistema corrupto y oligárquico como todos los fundados con el pretexto de la salvación del pueblo.
La segunda mucho menos sutil y más llena de subtextos es El Pantano, estrenada este año. La anécdota se reduce a una mera historia policial donde una prostituta y un miembro del partido comunista polaco cabeza del deporte en un pequeño pueblo del oeste de Polonia son asesinados en un bosque cercano a la ciudad. Este sólo sirve de pretexto para contar una historia de corrupción y represión al interior de la sociedad polaca comunista. Lo peor es que no habla de la represión del estado contra los ciudadanos, que claro que existió, si no de esa autorepresión a la que se habituaron muchos dentro de este tipo de sociedades por miedo a perder las pocas libertades que les quedaban, por miedo a perder la vida y no necesariamente a morir, si no a ser marcado como opositor o renegado del sistema.
La historia protagonizada por dos periodistas uno viejo Witek, que trata de huir de Polonia para buscar al amor de su vida después de 40 años, un ambicioso joven periodista Piotr hijo de un importante miembro del politburó polaco que abandona Cracovia para crear renombre por su cuenta en un pueblo pequeño. Algo que el mismo sabe no es cierto pues el trabajo en el diario de la pequeña ciudad lo ha conseguido gracias a su padre. La esposa de este joven periodista una joven quien a pesar de estar embarazada es lesbiana o por lo menos bisexual y se ha casado para guardar las apariencias y sobre todo con el hijo de un importante político para sentirse protegida. Un sistema de prostitución controlado por el estado y noticias manipuladas; “oficiales”, que no se cuestionan porque no tiene sentido hacerlo; si así lo ha dicho el partido y no hay manera de que haya sucedido de otra manera. La importancia de la nota la marca la agenda del politburó.
Por otro lado, se encuentra el suicidio de un par de adolescentes que sin explicación alguna han decidido lanzarse al vacío desde la azotea del edificio donde vive ella. Nadie parece interesarse por este caso, los suicidios en esas sociedades no eran reconocidos, era poner en claro el fracaso del gobierno para hacer felices a sus ciudadanos. Además, la joven era hija de un preso político, un experiodista que interesado en denunciar la corrupción y que en su momento fue denunciado por Witek, con la única intención de salvarle la vida.
La chica independientemente de ser una estudiante modelo, era una apestada dentro de la escuela por el asunto de su padre. Estigmatizada y despreciada, es además atacada sexualmente por un depredador sexual cobijado por el sistema. Algo que ella aprovecha para hacerse de unos dólares para deslumbrar al joven que se ha enamorado de ella y ella de él.
El suicidio hace a Witek, tener cierta carga de conciencia que lo obliga a necesitar aclarar la trágica historia. Sin embargo, existe otro factor que lleva a Witek a tratar de averiguar la verdadera razón sobre el suicidio; el eco de su historia personal y de los horrores que sucedieron al terminar la II Guerra Mundial en el bosque aledaño a la ciudad, donde tanto la joven pareja contemporánea como él y su amada en su momento se daban cita.
Mientras Piotr encerrado en su deseo sexual reprimido decide seducir a la viuda del político asesinado, o termina siendo el cazador cazado. Piotr tomara las peores decisiones a lo largo de los cinco episodios de la miniserie, pero saldrá sin problemas de los embrollos gracias al peso de su padre, su ingenuidad e inexperiencia se verán mermadas, que no destruidas, mientras que la vida de Witek cambiará de manera radical y él, acostumbrado a no cuestionar, terminara aceptando los designios del destino de manera estoica y tal vez por primera vez haciendo uso de lo poco de su libre albedrio que le permite la sociedad totalitaria en la que vive.
El Pantano es mucho más que una miniserie policiaca, es una reflexión acerca del daño que hicieron los gobiernos totalitarios a los individuos, a sus anhelos, sus gustos y sus ambiciones en aras del bien sectario de asesinos, censores, tiranos y corruptos que gobernaron muchas de estas naciones y otras que aun gobiernan en otras latitudes en la actualidad.
Las sociedades han cambiado y cambiaron a lo largo del siglo XX, pero no por los políticos, si no por los ciudadanos que derrumbaron muros y acabaron con los tiranos burocráticos de estados basados en la prepotencia, la impunidad y la corrupción. Y ese cambio permite que hoy se reflexione y se muestre sobre estas sangrientas tiranías modernas en series como El Pantano.

publicado en roastbrief.com.mx el 28 de abril de 2020
imagen netflix.

martes, 28 de julio de 2020

Canel’s de extra de taquería a corporativo mundial




La productora de chicles y golosinas con sede en San Luis Potosí inició hace casi cien años vendiendo sus golosinas y hoy es un poderoso corporativo mundial.

Armando Enríquez Vázquez

En los años sesenta, setenta y ochenta, durante mi infancia, adolescencia y temprana edad adulta los Canel’s era unos pequeños, muy pequeños chicles que servían para rellenar las piñatas con algo más o te los daban como extra en la charolita de la cuenta de las taquerías, incluso llegaron a ser de los primeros productos que por ser sumamente económicos te ofrecían en las cajas de los autoservicios a falta de monedas de 20 o 5 centavos. Canel’s era un chicle muy barato y popular que nada tenía que hacer, eso pensábamos entonces con marcas como Motitas o el Chicle Canguro o con la cajetilla vistosa y amarilla de los Chiclet’s. Ni Motitas con sus innovadores sabores de plátano y coco, ni los Canguro existen ya, pero Canel’s, que como el pequeño David derrotó en batallas legales a empresas multinacionales como Warner Lambert, es hoy un enorme corporativo con empresas y operaciones diversificadas pero que aun produce chicles y otras golosinas para México y más de 60 países. De acuerdo con el sitio de la confitería internacional candyindustry.com Canel´s ocupó en 2019 el lugar 55 entre las empresas confiteras del mundo y es sin duda la marca de gomas de mascar mexicana más vendida en Estados Unidos y probablemente en el mundo.
Envueltos a la perfección cada diminuta pastilla de chicle tiene un color diferente de acuerdo al saborizante de la goma de mascar y si lo pienso con detenimiento en décadas pasadas eran verdaderas obras de arte. Pues no era una envoltura con un color liso y ya, tenían el logo y el nombre de la marca y en uno de los extremos una greca de color contrastante, más el negrito icóno de la marca por décadas. Hoy las pequeñas pastillitas aún existen, pero el producto más popular de la marca es el paquetito con cuatro pastillas de chicle envueltos en celofán.
Lo que más llama mi atención ahora y no he encontrado aún la información correspondiente es el por qué del nombre y menos aún el logo políticamente incorrectísimo, el día de hoy, la cara de un personaje negro estereotipado que, a pesar de no encontrar la fecha, presumó que desapareció en los años noventa cuando la marca comenzó a tener miras de crecer el negocio allende las fronteras de México. En un inicio El Negrito así bautizado por la marca, era dibujado estirando un hilo de chicle que iba de su boca con la mano.



La marca, otro ejemplo de empresa exitosa mexicana, continua después de casi cien años siendo un negocio familiar que encabeza hoy un miembro de la tercera generación de la familia; Roberto García Navarro.
La empresa nació hace noventa y cinco años en la ciudad de San Luis, capital de San Luis Potosí un estado en el centro de México. Cuando inicio en 1925 el principal producto de Canel’s eran los chocolates. De hecho, la empresa llevó en un principio el nombre de Fábrica de Golosinas La Victoria, además de los chicles actualmente los productos principales de Canel’s son; Vaquitas, paletas de cajeta, pastillas refrescantes llamadas Clear’s, caramelo macizo, caramelo suave de marca Tueni y gomitas.
En esa diversificación que mencione al inició del texto Canel’s hoy no sólo se dedica a los chicles y dulces, el Grupo Canel’s tiene una inmobiliaria, servicios aéreos y de almacenamiento, son socios de TV Azteca al menos en San Luis Potosí. Canel´s tiene patrocinios en el ciclismo mexicano desde 1985, en el automovilismo nacional desde hace dos décadas y actualmente en el equipo local de futbol, el Atlético San Luis.


publicado en thepoint.com.mx el 20 de julio de 2020
imagenes. canels.com.mx

martes, 21 de julio de 2020

El Más Antiguo Galván, el almanaque que nació con México.




La primera edición de este calendario se remite a 1826 cuando el país que iniciaba su vida independiente.

Armando Enríquez Vázquez.

Hace ya más de treinta años que me mostraron el Más Antiguo Galván por primera vez, la persona que me enseñó este calendario lleno de información impreso en forma de libro, me comentó que era un texto esencial para los productores de cine, pues en sus páginas se encuentra un muy acertado pronóstico del tiempo a lo largo del año, más acertado en esos años que los servicios meteorológicos de noticieros y programas de radio y televisión. A lo largo de algunos lustros lo compré religiosamente al iniciar el año, pero debo aclarar que nunca lo he visto en la estantería o escritorio de productores de televisión o de cine. Hace mucho tiempo que no me hago de uno, pero este calendario que tiene diferentes usos prácticos se sigue publicando de manera anual.
Entre la información que el Calendario del más antiguo Galván se encuentra además del pronóstico de tiempo, los fenómenos astronómicos del año, mapas de la bóveda celeste y la visibilidad de las diferentes constelaciones a lo largo del año, el santoral diario, las eras y ciclos cronológicos, las estaciones del año y las fechas santas del catolicismo. A lo largo del siglo XIX y parte del siglo XX el Más Antiguo Galván era indispensable para los agricultores del país. Aunque de acuerdo con una cita de la obra de Artemio del Valle Arizpe Calle vieja y calle nueva que aparece en sitio de Internet de la Librería y Ediciones Murguía que edita el calendario desde 1854 el escritor mexicano menciona que el calendario era tremendamente popular en los hogares mexicanos y servía como una pequeña enciclopedia, además de que al incluir todo el “martirologio” católico ayudaba a los padres para seleccionar el nombre de sus futuros hijos.
Mariano Galván Rivera nació en Tepoztlán alrededor de 1791. de acuerdo con el historiador Joaquín García Icazbalceta lo identifica como el fundador del negocio de librero en la Ciudad de México en el México independiente. En 1826 se publicó el calendario del Más Antiguo Galván por primera vez lo que significa que este año llegó a su edición 194, lo que lo hace el calendario más antiguo en México que continúa imprimiéndose.
La empresa editora y librería de Mariano Galván se encontraba en los portales de los Agustinos, lo que es hoy la Plaza de la Constitución, mejor conocida como Zócalo y la Avenida 16 de septiembre. En un inicio el calendario se llamó Calendario Manual, dada la existencia de otro Calendario Manual editado por otro famoso editor de la época de apellido Ontiveros, por lo que el calendario, se nombró Calendario Mariano Galván Rivera. En 1858 una versión que podríamos llamar pirata salió al mercado con el mismo nombre por lo que los editores decidieron volver a cambiar el nombre por el Calendario del más antiguo Galván. Las ediciones de 1845 y 1848 fueron impresas en el extranjero la primera en Nueva York y la segunda en Hamburgo.
En 1846 Manuel Murguía y Romero fundó el 11 de junio una librería y editorial, el negocio de Murguía se encontraba en el llamado Portal del águila de Oro. Hoy la Librería y Ediciones Murguía se encuentra en la calle de 16 septiembre número 54, a unos metros de su local original, que fue demolido en 1896. Desde esa fecha la empresa ocupa ese edificio construido para alojarla. La empresa sigue siendo propiedad de los descendientes de Manuel Murguía y Romero. A lo largo de 88 años de 1854 a 1942 el calendario se imprimió con los mismos tipos de la imprenta que se guardaban cuidadosamente.
Galván Rivera fue responsable de otro calendario que no fue tan exitoso al que llamó Calendario de las Señoritas Megicanas, que tenía como texto de dedicatoria: A las señoritas megicanas, cuyas virtudes forman el honor de su sexo: Su ternura. El consuelo del hombre; su belleza, el más brillante ornamento de su patria. Ofrece este leve obsequio Mariano Galván Rivera.
Además, Galván, fue uno de los promotores del libro y lo escritores más importantes de su época. Publicó El Periquillo Sarniento de Joaquín Fernández de Lizardi, La primera Biblia Mexicana, El Quijote de la Mancha además de editar los periódicos como El Observador de la República Mexicana y El indicador de la Federación Mexicana, junto con Don José María Luis Mora.
Miembro del grupo conservador que apoyo la llegada de Maximiliano y después fue arrestado y encarcelado, por su avanzada edad fue liberado y murió en la Ciudad de México el 28 de abril de 1876 a los 94 años.
El Calendario del Más Antiguo Galván se puede encontrar en todos los puestos de periódicos del Centro Histórico de la capital mexicana a principios de cada año.




publicado en thepoint.com.mx el 13 de julio de 2020

viernes, 17 de julio de 2020

Otras de Harlan Coben.



El exitoso autor de novelas policíacas ha sido adaptado y ha producido diferentes series de televisión, tristemente la receta es repetitiva y se agota rápido.

Armando Enríquez Vázquez

Hace unas semanas vi la serie Bosque adentro, producida por Netflix y basada en una novela del escritor norteamericano Harlan Coben, la serie que es bastante visible me llamó la atención por ser una producción polaca de un texto escrito por un norteamericano.
Como digo es una serie visible, pero nada del otro mundo. Sin embargo, mientras investigaba la semblanza del escritor norteamericano, aprendí que esta no es la primera, ni la única serie adaptada de la obra de Coben. En 2006 se estrenó la película Ne les dis a personne, (No le digas a nadie) basada en la novela homónima del francés.
La primera producción para televisión utilizando una obra del autor norteamericano fue la miniserie francesa Une Chance de Trop producida en 2015 por la compañía VAB y basada en la novela Última oportunidad. Después el norteamericano escribió para BBC la miniserie The Five, que se estrenó en 2016.
En Netflix existen por lo menos otras dos series basadas en obras de Coben: Safe y The Stranger.
Por lo que he leído acerca de las primeras series mencionadas y las tres que vi en Netflix utilizando la obra del norteamericano, el escritor tiene una receta que repite constantemente, aprovechando familias rotas y familiares desaparecidos. La historia central se basa siempre en un personaje que investiga la desaparición de la esposa, esposo o hijo.



The Stranger es sin duda la que a pesar de tener la misma fórmula resulta más atractiva y cuenta la historia de una misteriosa mujer (Hannah John-Kamen) que se acerca una tarde a Adam Price (Richard Armitage) para revelarle un secreto que lo afecta directamente y tiene que ver con un embarazo ficticio de su esposa. La historia se desarrolla con la chica revelando secretos a diferentes personas hasta que se cometen diferentes crímenes.
Para Coben las adolescencias traúmaticas y las separaciones o desapariciones dolorosas que pueden ser resultado de un crimen parecen ser el lugar común y base de las historias de que escribe el autor o al menos de aquellas que se han adaptado en formato de series o miniseries.  
Safe es más pan con lo mismo; un familiar desaparecido y la búsqueda que descubre el pasado oscuro de un familiar. De hecho, el nombre parece hacer referencia a esa zona de confort en la que se desenvuelve Coben en su escritura.  
Si viste Bosque adentro y te gustó probablemente encuentres Safe más que aburrida, lo cierto es que yo te recomiendo ver The Stranger, que aun partiendo de los mismos elementos tiene sorpresas en la argumentación normal del autor, lo cual no tiene nada de malo, todas las historias escritas son variaciones de un puñado de argumentos, lo malo con Coben es que él sólo le da una revolcada a sus argumentos, creando variaciones sobre el mismo argumento.
Para un autor de historias de misterio utilizar la misma receta de manera no parecía ser algo lógico, sin embargo, Harlan Coben no se puede quejar en cuanto a la popularidad de sus novelas. Es un autor de bestsellers. Sin embargo, para mi gusto cuando revuelcas demasiado a la burra, no solo sigue siendo la misma, si no que en el caso de un creador de misterios estos se vuelven aburridamente previsibles.
Si no has visto ninguna de estas miniseries empieza por The Stranger, después Bosque adentro y después cambia de autor y mantente lejos de las creaciones de Harlan Coben.

imagenes: wikipedia.es.org
                    Netflix

martes, 14 de julio de 2020

Historias del Loop ciencia ficción en serio.



Netflix tiene Dark, pero Historias del Loop de Amazon Prime es una verdadera joya en materia de ciencia ficción y narrativa. Uno de los tres estrenos más importantes en 2020.


Armando Enríquez Vázquez
Hace poco al leer el prólogo a una antología de cuentos del escritor de terror Brian Lumley, el mismo autor expresa en el texto su esperanza porque la fiebre de escritores gore pronto desaparezca del género para dar paso a los verdaderos escritores de terror. Algo parecido pasa con la ciencia ficción donde el genero se encuentra secuestrado por el apocalipsis, los viajes en el espacio con historias situadas miles de años en el futuro, aventuras con monstruos intergalácticos y villanos de melodrama por un lado o por dramas tecnológicos que no saben hablar más que Internet y el desarrollo de tecnologías que lo sustituyan construyendo nuevas redes de interconectividad que atentan contra la individualidad del ser humano en aras de un siniestro big brother global.
Amazon Prime lo volvió a hacer y produjo una serie de ciencia ficción del más alto nivel y que nos regresa a los clásicos del género. Historias del Loop es sin duda una de las series más brillantes que se han hecho del género en la última década cuando menos. Basada en el libro homónimo del artista gráfico y escritor sueco Simon Stalenhag, publicado en 2015. La serie fue creada y escrita por Nathaniel Halpern quien ha escrito capítulos para series como Legión y Outcast entre otras.
Historias del Loop consta de 8 entregas, la historia sucede en la región central de Estados Unidos, en una pequeña comunidad donde la gran mayoría de las personas trabajan para una empresa que construyó un acelerador de partículas bajo tierra llamado Loop. Las historias que se cuentan a lo largo de las ocho entregas nos hablan de 8 momentos diferentes a lo largo de la historia del pueblo y sus habitantes: personas que trabajan en el Loop o que están relacionados con él y la familia que lo creó.
Las historias se cuentan de manera independiente y suceden en un orden, que aunque cronológico, no necesariamente cuentan una historia que lo sea. Protagonizada por Rebecca Hall en el papel de Loretta una científica casada con el hijo del fundador del Loop, Jonathan Pryce como Russ el suegro de Loretta, Duncan Joiner y Daniel Zolghadri como Cole y Jakob los hijos de Loeretta, Paul Sneider es George el esposo de Loretta, Jane Alexander interpreta a la esposa de Russ, Nicole Law es May el crush de Jakob y joven con dotes de ingeniera, Tyler Bernhardt como Danny el mejor amigo de Jakob, Dan Bakkedahl y Laureen Weedman son los padres de Danny y Alessandra de Sa Pereira su pequeña hermana sordomuda. Stefanie Estes interpreta a Sarah la maestra de la escuela y Atto Essandoh a Gaddis, el solitario guardia de la puerta principal de Loop.
Estos son los personajes que aparecerán a lo largo de la serie como personajes principales de un capítulo o incidentales en otros, porque a diferencia de las series y miniseries comunes, Las historias del Loop, presentan capítulos que parecen unitarios aunque no le sean y al final nos demos cuenta de la gran soledad y determinismo que rodea a los personajes, en especial a Loretta y sus seres amados son el tema de la serie.
Lejos muy lejos de ser una serie optimista, Historias del Loop es una bellísima colección de relatos acerca de una comunidad, las relaciones humanas y lo humano demasiado humano que es también la ciencia ficción. La tecnología y temas científicos son marco y pretexto para demostrarnos aspectos fundamentales de la naturaleza humana.
En la parte creativa para que cada uno de los capítulos tengan un estilo personal de contarse la producción decidió dar cada uno de los ocho capítulos a un director diferente; Ti West, un director dedicado básicamente a ese género mal llamado terror, Andrew Stanton que se ha destacado en su trabajo como escritor para Pixar y que también ha dirigido capítulos de Stranger Things, Mark Romanek especializado en cortos y videoclips, Tim Mielants que ha dirigido episodios de Peaky Blinders y de la segunda temporada de The Terror, Charlie McDowell que ha dirigido capítulos de Dear White People de Netflix, la coreana So Yong Kim, Dearbhla Walsh que ha trabajado en series como Fargo, Penny Dreadful, los Borgia, Los Tudor, y Jodie Foster. Cada capítulo guarda la manera de ver la vida de su director. Manteniendo la línea de cada personaje y la estética que dictan los dibujos de Stalenhag; grandes espacios abiertos, con robots y las enormes torres que en ciertos capítulos parecen personajes por sí, cada una de las historias es una obra de autor. Los personajes se vuelven entrañables en ciertas historias y despreciables en otras, pero son sólo seres humanos. Más allá de la tecnología, de los universos paralelos, de los huecos en el tiempo, Historias del Loop es una oda acerca de cómo lo humano sobrevive a la tecnología y conquista la eternidad, aunque sea por un breve instante. Es acerca de la perfección de un diseño que va más allá de las vulgares o complicadas creencias y cuentos que nos guste contarnos. De lo efímero de esa perfección.
La fragilidad y contundencia en las relaciones humanas que prolongan en el tiempo ya sea por azar o por un diseño divino. Pocas veces he visto una serie de ciencia ficción tan poderosa, tan impresionante por su sencillez y profundidad. No se necesitan peleas interestelares, ni poderosos monstruos capaces de destruir el universo, para que este se colapse ante nuestros ojos a diario y solamente porque esa es la estructura básica de la naturaleza: Cambiar. La emotividad de la serie la acerca más a la poesía que a la prosa.
He tratado de evitar contar nada acerca de la trama, porque creo que una serie como Historias del Loop merece verse sin conocer los hechos, ni las historias, aunque con los comentarios vertidos ya haya sesgado al lector. Creo que todo aquel que guste de una buena historia no puede dejar de ver Historias del Loop.

Publicado en roastbrief.com el 13 de abril de 2020
imagen Amazon Prime

lunes, 13 de julio de 2020

Una cabaña de troncos construida con miel.



Entre las marcas populares de miel de arce, o maple, se encuentra esta que como logo lleva una cabaña en el nombre y en el logo.
Armando Enríquez Vázquez
Se dice que en cierta ocasión un jefe algonquin, una de las naciones indígenas del norte de América, molesto por algo, lanzó su tomahawk contra un árbol. La esposa del jefe, una vez que éste se hubo ido, vio un líquido gotear de la corteza del árbol donde el hacha del jefe se había clavado, recolectó el líquido en cubeta de madera y pensado que era agua, lo utilizó para hervir un trozo de carne de venado. Tanto el jefe como su esposa quedaron sorprendidos de la dulzura y el delicioso del líquido y el que este impuso en la carne, pensando en cómo esto había sucedido la mujer llegó hasta la sabia del árbol y desde entonces se empezó a recolectar el líquido y hervirlo para conseguir la miel que llamamos d maple en una mala traducción del tipo de la especie de árbol que en español se conoce como arce.
Los colonos ingleses y franceses aprendieron de los nativos como extraer la sabia de los arces y la fabricación miel a falta de abejas locales o de fuentes como la caña de azúcar o el betabel para endulzar sus alimentos. Todo tipo de endulzante y en especial el azúcar fue durante siglos un verdadero artículo de lujo que sólo era accesible a las clases económicas más altas.
En el pequeño poblado de Forrest Lake en Minnesota, al norte de Minneapolis, alrededor de 1887, Patrick J. Towles, un hombre que había fracasado como tendero en Chicago, comenzó a comercializar miel de arce en 1887 en sociedad con un amigo de apellido McCormick. La marca de la miel fue desde su inicio Log Cabin, haciendo honor, de acuerdo al sitio de la marca, a la cabaña de madera en la que vivió durante su infancia Abraham Lincoln presidente de Estados Unidos, abolicionista y héroe personal de Towles.
De acuerdo con el sitio maplesyruphistory.com Log Cabin tenía dos versiones; la miel pura de arce que era mucho más cara y una mezcla de miel de arce con una solución azucarada que la hacía más barata y mantenía un gusto a la original. Esta última por razones económicas era mucho más popular. La mezcla no era una invención de Towles, era y sigue siendo una solución para los altos costos del producto puro.
El verdadero éxito del producto de Towles se dio cuando en 1897, cuando uno de los vendedores de la empresa patentó un innovador envase su producto; unas latas en forma de cabaña y lo atractivo del empaque logró posicionar la marca en la mira y preferencia del consumidor. En 1904 Towles comenzó a ofrecer un tercer producto hecho de azúcar de caña para la fabricación de golosinas caseras conocido en inglés como Penoche Syrup.
Hacía 1910 la miel de Towles comenzó a venderse fuera de Minnesota, en especial se atacó uno de los mercados más importantes para la miel de arce; el estado de Vermont. Tras un incendio en los pisos superiores de la empresa en la planta en Minnesota, Towles decidió comprar una planta abandonada en el pueblo de Saint Johnsbury en el estado del noreste de Estados Unidos y poco a poco la operación se fue moviendo a Vermont.
El cambió fue exitoso, para Towles que llegó a vender más de un millón de dólares anuales con su producción en Vermont, pero el gusto duró poco, Patrick J. Towles murió en 1913 y su hijo decidió regresar la planta a Minnesota.
En 1927, Log Cabin fue comprada por General Mills que a lo largo de más de 6 décadas hizo de la marca una de las emblemáticas de la compañía y una tradición en las mesas de Estados Unidos y México para acompañar los hot cakes y los wafles, pero la marca dejo mucho tiempo atrás de ser una miel de arce, para convertirse en una mezcla azucarada con sabor a arce y ganarse el desprecio de la sociedad de productores de miel de arce en Norteamérica que expulsaron a la marca de su sociedad y lo mismo sucedió entre muchos consumidores que dejaron de comprarla.
Cuando en 1990 General Mills desapareció al ser adquirida por Kraft la marca pasó también en un principio a ser una de las marcas del gigante en alimentos. Sin embargo, Kraft vendió la marca al corporativo Aurora en 1997, esta empresa desapareció en 2004.
Log Cabin actualmente es una marca de la empresa Conagro uno de los gigantes alimentarios del mundo.

publicado en thepoint.com.mx el 6 de julio de 2020
imagen logcabin.com 

sábado, 11 de julio de 2020

Asesinatos del Valhalla otra de crímenes nórdicos.



Otra serie noirdik con diferentes capas de lectura, situada en la sociedad moderna de Islandia que vale la pena ver. 

Armando Enríquez Vázquez

Nunca me canso de las historias de crímenes nórdicas, el famoso Nordic Noir, y Netflix acaba de estrenar una buena, el titulo traducido desde la visión norteamericana de las cosas es Los Asesinatos del Valhalla, sin embargo, el titulo original de la serie es Brot, la palabra islandesa significa literalmente violación y este título tiene que ver más con el tema y el subtexto de la serie que el más obvio y pedestre seleccionado por Netflix.
La historia como muchas de las series del género está llena de vueltas de tuerca, de arcos narrativos paralelos igual de interesantes que el principal y que además completan y añaden el cuadro del tema principal de la serie.
La historia creada y escrita por Thordur Palsson, trata sobre tres asesinatos que se cometen en la actualidad, los asesinados se relacionan en su pasado, cuando los tres trabajaban en un orfanato llamado irónicamente Valhalla, el salón donde los vikingos que morían en batalla con honor iban a celebrar sus hazañas con los dioses y las valkirias.
En la serie, en Islandia de finales de la década de los ochenta Valhalla fue una casa hogar para jóvenes hombres de familias disfuncionales, donde los jóvenes internos fueron víctimas de abuso físico, mental y además fueron violados. Un extraño visitante llegaba periódicamente a Valhalla y en un cuarto totalmente oscuro abusaba de uno de los jóvenes internado en el lugar elegido por los tres guardianes del lugar. El abusador cortaba una pequeña parte del antebrazo de su víctima, como un trofeo y un recordatorio.
En un inicio, tras el primer asesinato, la detective Kata (Nina Dogg Filippusdottir), quien espera el ascenso como jefa de su división en el cuerpo policiaco de Reikiavik, es decepcionada pues ese mismo día que se descubre el primer asesinato y se espera el anuncio de su ascenso, su jefe nombra a otra persona de otra división totalmente diferente.
Además, se decide traer a un detective desde Noruega para ayudar con la investigación, Arnar (Björn Thors) aunque es miembro de la policía noruega Arnar nació en Islandia, pero la sociedad protestante en la que creció y su orientación sexual hacen que Arnar sea maltratado y despreciado por su padre hasta que logra el que sea expulsado de la comunidad, entonces un policía Magnus (Sigurdur Skúlason) y su esposa deciden adoptar a Arnar y criarlo. El policía avanza con el paso de los años en el escalafón policiaco y cuando Arnar regresa a Reikiavik Magnus es el jefe de Kata y quien solicita la inclusión de Arnar en la investigación pues está orgulloso de él.
Al mismo tiempo, Kari (GrettirValsson), el hijo adolescente de Kata se ve vuelto en un incidente que termina en la violación de una joven en una fiesta que hace a Kata llevar a cabo acciones de encubrimiento aprovechando su puesto.
Los Asesinatos de Valhalla es una serie tiene como temas la justicia, el poder, el tiempo. A falta de una justicia impartida por la sociedad, la justicia que imparte un ser humano roto por esa injusticia tan humana y sustentada por el poder. Pero principalmente como su nombre en islandés lo indica la violación, en todos sus sentidos; física, mental, en la confianza.
La fuerza de la actuación de Nina Dogg Filippusdotir, se iguala a otras icónicas del género: Sofie Grabol en la inolvidable y esencial Forbrydelsen, y Sofia Helin en Bron/Broen. Porque Kata no es solamente una eficiente y talentosa detective que tiene que ser políticamente alejada del caso, incluso a manera de protegerla, es una celosa, posesiva y ciega madre capaz de hacer cualquier cosa por defender a su hijo. Su personaje se derrumba para volver a crecer y llegar a lugares que únicamente le pueden augurar la muerte. A su lado la construcción del personaje de Arnar contenido hasta el punto de hacer del personaje una especie de autómata, al que sólo parece interesar su trabajo. Que no supera, ni quiere superar a esa familia que lo ha rechazado desde su infancia, que lo ha maltratado y obligado al exilio. El no permitirse tener cualquier tipo de sentimientos, suprimir su humanidad en base a trabajo y ejercicio, lo convierte en un frío e introvertido personaje, que cobra su naturaleza humana cuando bebe.
La serie cuestiona como en otras de estas historias nórdicas la importancia de los medios públicos y su actitud contestaria y sensacionalista que sólo reacciona cuando surge la nota y como parte de generar ratings. Aunque en el caso de los Asesinatos del Valhalla esta representación de los noticieros de televisión no es tan negativa.
Los Asesinatos del Valhalla, enmarca la frialdad de sus personajes y su tema con los hermosos gélidos paisajes de la Isla del norte de Europa.
Con sólo ocho capítulos Los Asesinatos del Valhalla es una miniserie que vale la pena verse.


Publicado en roastbrief.com el 6 de abril de 2020
imagen Netflix.

martes, 7 de julio de 2020

Juanita Pérez la barbie mexicana.




Creada por una actriz española avecindada en México y como réplica de una popular muñeca española, esta muñeca tiene más de 55 años de existir.

Armando Enríquez Vázquez

En las décadas de los setenta y ochenta en la calle de Parroquia y Avenida Insurgentes contra esquina a la explanada que da entrada al Puerto de Liverpool de Insurgentes, había una serie de locales unidos por un pasillo exterior elevado. Uno de esos locales era un restaurante llamado Alden al que como estudiante acudía con los compañeros de pinta a tomar café. En uno de los locales aledaños se vendía una muñeca que se llamaba Juanita Pérez.
Juanita Pérez era una especie de celebridad entre los juguetes para niñas, Lily-Ledy y Plastimarx no competían con esas muñecas que eran para un mercado menos popular.
En Canal 5, que se especializaba durante mañanas y tardes en programación infantil, eventualmente se promocionaba a la muñeca. Con la destrucción de ese corredor de locales en 1999 para la creación de Plaza Galerías la tienda desapareció.
La historia de esta muñeca que ahora se vende en almacenes y por internet está relacionada con una mujer que llegó de España a México en los años 50 y actuó en un puñado de películas en la decadencia de la llamada Época de Oro del Cine Mexicano.
Guillermina Green nació en 1924 en Sevilla, España. En la década de los años cuarenta actuó en algunas películas en España y a diferencia de los exiliados españoles de la Guerra Civil, llegó a México después de finalizar la II Guerra Mundial y cuando la economía española estaba por el suelo, creyendo que aquí iba a hacer una gran carrera en el cine, como sucedió con algunos de sus paisanos, sin embargo, y a pesar de haber participado en seis películas en un año, 1950, solo una de ellas es recordada, el mediocre melodrama ranchero También de dolor se canta. Su carrera como actriz terminó pronto pues se casó con el productor de cine Guillermo Calderón Stell, desde ese momento Guillermina se dedicó a ser un ama de casa.
En 1962 viajó a España, su situación se lo permitía al no ser una exiliada política como la gran mayoría de la comunidad española en nuestro país en esos años. En ese viaje conoció una muñeca española llamada Mariquita Pérez, lo que le dio la idea de adaptar el concepto a México, en esos años el comercio exterior mexicano era muy limitado debido a las leyes proteccionistas que prevalecían en nuestro país y que contribuyeron una década después a tener un pésimo desarrollo industrial, carente de calidad y de interés por el consumidor.
Guillermina creó entonces a Juanita Pérez. A lo largo de 58 años la muñeca se ha mantenido en oferta. Juanita tiene diferentes vestuarios y estilos que se pueden comprar por separado para mantener a la muñeca a la moda o vestirla de eventos especiales. De acuerdo con un reportaje de Marina Angulo publicado en 2014 en el diario El Universal, la empresa decidió crear un universo alrededor de Juanita, de la misma manera que otras muñecas exitosas, se inventó una familia Pérez con hermanos y hermanas, que con el tiempo desapareció. Hoy Juanita es la única de la familia.
La muñeca es un símbolo de una época de nuestro país y sobre todo de la clase media de esos años; blanca, de ojos claros Juanita es un recordatorio de los complejos de los hoy llamados Whitexicans.
Guillermina murió en 2006 en la Ciudad de México, desde entonces es su hija Ana Laura Calderón la cabeza de la empresa, que se mantiene de manera marginal, pero sobrevive.


publicado en thepoint.com.mx el 22 de junio de 2020
imagen juanitaperez.com.mx

jueves, 2 de julio de 2020

Sandra; asistente personal muy personal.





La propuesta de Sandra y su narrativa obliga a reflexionar no sólo en la tecnología, si no si es cierto el asunto del desarrollo de la Inteligencia Artificial como nos quieren hacer ver. 

Armando Enríquez Vázquez


La empresa productora de podcast Gimlet produjo en 2018 un podcast de ciencia ficción que vale la pena escuchar. El nombre es Sandra y se puede escuchar de manera directa en la pagina de la empresa o en cualquier plataforma de podcast.
Sandra es una fábula en 7 capítulos acerca del lado humano de la tecnología y los errores que cometemos los humanos cuando jugamos con ella.
Sandra es una metáfora de Alexa de Amazon o Siri de Apple; una aplicación que puede contestar las dudas de usuario y “ayudarlo” a lo largo de su diario vivir.
En el caso de la serie la aplicación se llama Sandra, pero a diferencia de las aplicaciones de Amazon o Apple, Sandra es operada por cientos de seres humanos dedicados a responder preguntas y resolver situaciones específicas del usuario. Sus voces son convertidas es una misma voz que es Sandra
La historia nos cuenta el ingreso de una nueva empleada a la empresa que administra y opera a Sandra. Helen Perera (Alia Shawkat), es una joven a punto de divorciarse de un hombre demasiado problemático, el clásico ignorante, vividor, macho de cualquier pueblo del centro de Estados Unidos como lo es pequeño pueblo donde vive Helen y donde están las oficinas de la empresa creadora de Sandra, para Helen que se casó durante su adolescencia, este trabajo es una luz al final del camino para un mejor futuro y su única forma de evadirse de su realidad y de su entorno. Tras la entrevista final por parte de la sección de recursos humanos de la empresa, Helen es asignada a la sección de pájaros de Sandra. Desde su diadema constantemente conectada Helen tiene como trabajo el ayudar a los usuarios de Sandra a resolver sus dudas sobre las aves. La voz de Sandra es la de la actriz Kristen Wiig, conocida para los aficionados a SNL.
Como es de esperarse no todos los usuarios son ideales: adolescentes escatológicos, niños que juegan con la aplicación o personas solas que se comunican con la aplicación en busca de compañía, borrachos obscenos. Helen, en un momento de impotencia, decide apartarse de su línea de temática cuando en medio de una consulta y hacer de consejera de una de las usuarias a la que ayuda a tomar la decisión de separarse de su abusiva pareja, lo que para sorpresa de Helen en lugar de hacerla merecedora de una llamada de atención, hace que su jefe Dustin (Ethan Hawke) la aliente a seguir por ese camino pues así logra que el usuario tenga una experiencia más personalizada y por lo tanto tenga un mayor engagement con la marca.
Este apoyo aunado a la ciega confianza y arrogante posición de Helen, junto con las acciones de Donny (Christopher Abbot), el marido de Helen que pone, como es de esperarse, condiciones absurdas para firmar los papeles del divorcio y la aparición de un usuario desolado, Tad (Avi Rothman) que parece dependiente de la aplicación y con el que Helen comienza una relación a partir de su aparente empática soledad, desatan rápidamente el conflicto de la historia.
La propuesta de Sandra y la narrativa nos obliga a reflexionar no sólo en la tecnología, sino acerca de lo realmente confiable que esta es y si es cierto el asunto del desarrollo de la Inteligencia Artificial como nos quieren hacer ver. Acerca de cómo son más importantes la ganancias de una empresa que la verdadera calidad del producto. Acerca de lo humano que aun hoy esta detrás de la tecnología. Sandra es una especie de Black Mirror. Más ingenua, menos totalitaria Sandra es una historia que vale la pena escuchar, con un extraordinario reparto como ya ha quedado en claro, otra de las ventajas es que ninguno de los capítulos llega a los 23 minutos de duración, lo que hace que uno pueda escuchar Sandra de un jalón. 
Escrita y creada por Kevin Moffet y Matthew Derby el podcast no produjo nuevos episodios después de esos primeros siete a pesar que su final que es muy abierto y puede no gustar a los racionalistas millenials que buscan las razones y explicaciones mal llamadas lógicas de todo, invitaba para algunos episodios más.
Se especuló si los derechos de Sandra habían sido adquiridos por una empresa de producción de series de video, incluso se ha mencionado a un productor de nombre Paul Lee para la adaptación en la pantalla de tele o computadora. A diferencia de otros podcasts, no existe indicio alguno que implique que Sandra se esté produciendo, en mi opinión personal. el encanto de Sandra radica en ser un producto totalmente auditivo y así como en las viejas radionovelas nos permita imaginar ese infinito call center perdido en medio de Estados Unidos, que además por su estructura narrativa a partir de consultas de audio permite que sea más llamativo en su formato de podcast.

publicado el 31 de marzo de 2020 en roastbrief.com.mx
imagen gimletmedia.com