En Puebla el 18 de noviembre de 1910 inició la Revolución en nuestro país. Dentro del grupo de patriotas dispuestos a no vender el movimiento y hacer frente a los esbirros de la dictadura se encontraba la hermana mayor de Aquiles Serdán, Carmen, que continuó la lucha de su familia.
Armando Enríquez Vázquez
Carmen Serdán nació en el seno de una familia liberal, el año de 1873 en Puebla de los Ángeles. Su Abuelo Materno Miguel Cástulo Alatriste fue gobernador del estado de Puebla en dos ocasiones, aliado de Juárez y enemigo de Santa Anna. Su Padre Manuel Serdán fue editor de un pequeño periódico liberal llamado La Ley del Pueblo, Carmen es la mayor de cuatro hermanos, Natalia, Aquiles y Máximo.
Manuel Serdán murió cuando sus hijos eran niños, entonces la madre Carmen Alatriste tomó el mando de la familia. Carmen estudió en el Colegio Teresiano y se nutrió con los periódicos que su padre publicaba, así como con la historia de su abuelo. Junto con su hermano Aquiles abrazó los ideales de los hermanos Flores Magón y eventualmente colaboró en el diario Regeneración. Carmen escribió también en El hijo del Ahuizote y en El diario del hogar, bajo el pseudónimo de Marcos Serrato. Tras leer la entrevista que el periodista norteamericano James Creelman le hizo al General Porfirio Díaz. Carmen, junto con su Hermano Aquiles se unieron a la causa anti-reeleccionista y apoyaron la candidatura de Francisco I. Madero.
Carmen fundó junto con un grupo de mujeres poblanas a las que pasaron a la historia como “Las Socias” y que estaba integrado por su madre, su hermana Natalia, Filomena del Valle, esposa de Aquiles, las hermanas Guadalupe, Rosa y María Narváez Bautista, Ignacia Vázquez y Paulina Maraver. Todas estas mujeres fueron activistas dedicadas a difundir las ideas y palabras de Madero a otros grupos femeniles de todo el país. En Puebla, también participó en el Partido antirreleccionistas de Puebla, junto con su hermano Aquiles, ambos sirvieron de anfitriones a Madero en su paso por la ciudad.
Tras el fraude electoral, Aquiles se vio obligado a abandonar el país y exiliarse en San Antonio Texas, Carmen siguió a en contacto con su hermano y se reunió con él y con Madero en octubre de 1910, regresó a Puebla con la encomienda de preparar el levantamiento armado en Puebla, junto con sus hermanos el 20 de noviembre. Pero los ojos de la autoridad estaban puestos sobre los Serdán, por su activa participación en el movimiento maderista, a pesar de ello Carmen logró hacer acopio de armas y municiones en su casa. Además junto con la ayuda de “Las Socias” difundieron y distribuyeron el Plan de San Luis. El Gobernador de Puebla Mucio Praxedis Martínez, ordenó vigilar a los hermanos y su casa. Los rumores de su participación en el movimiento revolucionario iban creciendo día con día, conforme se aproximaba la fecha fijada por Madero.
Finalmente el día 18 de noviembre el gobierno poblano, alerta del llamado al levantamiento el día 20, ordenó el cateo de la casa de la familia Serdán. Al llegar un piquete de policías al mando del General Miguel Cabrera, jefe de la policía de la ciudad, conocido por sanguinario y déspota. Al abrir la puerta y mostrar la orden de cateo, la respuesta por parte de los Serdán fue muy sencilla; una descarga de armas de fuego que mata al policía asesino. Dependiendo quién cuente la Historia algunos dicen que Aquiles mató al General, otros que fue Carmen, lo cierto es que los sobrevivientes regresaron al cuartel por refuerzos y entonces más de trescientos hombres entre policías y militares regresaron a la casa de los Serdán a cumplir la orden de cateo. Los hermanos y algunos amigos ya se habían pertrechado y recibieron a los representantes del gobierno a balazos.
Carmen salió al balcón de la casa y arengó a la ciudadanía poblana a tomar las armas y derrocar al gobierno de Díaz. “¡Viva la no reelección!” gritó la mujer. Mientras Natalia huía con los niños, los demás hermanos enfrentaron a los federales. Máximo murió junto con un grupo de hombres en la azotea de la casa, Carmen fue herida por una bala y tras la refriega fue capturada junto con su madre y su cuñada Filomena del Valle y llevadas primero a la cárcel de la Merced en Puebla y más tarde fueron trasladadas al Hospital de San Pedro, acusadas de recargar las armas de los hombres en la casa. Su traslado al hospital se debió al embarazo de Filomena y a una neumonía que presentaba Carmen Alatriste. Tras seis meses son puestas en libertad, justo para ver salir al General Porfirio Díaz en el Ypiranga, tras renunciar a la presidencia de México. Aquiles tras permanecer escondido más de quince horas fue abatido al salir por los policías que cuidaban el interior de la casa.
Carmen regresó al activismo y apoyó al maderismo. Tras el golpe de estado de Victoriano Huerta, Carmen Serdán formó parte de la Junta Revolucionaria de Puebla y se entrevistó con Venustiano Carranza. Apoyó el Constitucionalismo, sirvió de correo y traficó armas para el bando de Carranza, fungió también como enfermera de los soldados constitucionalistas. Tras el triunfo del Coahuilense, Carmen se retiró a la vida privada.
Murió el 21 de agosto de 1948. Carmen Serdán tenía 73 años de edad. Junto con sus hermanos es considerada iniciadora de la Revolución y su nombre está inscrito en Letras de oro en la Cámara de Diputados.
Publicado por thepinkpoint 5 de Septiembre de 2012
Foto: Bicentenario.gob.org
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