En un extraordinario libro acerca de un grupo de hombres
con el sueño de crear una nación, el escritor y periodista Matti Friedman nos
descubre un lado desconocido del nacimiento de Israel.
Armando Enríquez
Vázquez
Algo me hizo comprar el libro Spies of No Country Secret Lives
at the Birth of Israel, del periodista y escritor canadiense israelí Matti
Friedman. Por un momento al abrirlo y comenzar a leer las primeras líneas me
sentí tentado a dejarlo perderse en la estantería de la biblioteca, pero algo
me impulso a continuar con la lectura, al final no me he arrepentido.
Las acciones del libro suceden un poco antes de que estallé
la guerra por la creación del Estado Israelí en enero de 1948 y la primavera de
1950 cuando la nación había sido fundada. El libro relata las acciones de 4
miembros de la Sección Árabe, un grupo de inteligencia empírico formado por una
jerarquía igual de empírica de inteligencia creada por los judíos habitantes de
Palestina ante el interés de muchos judíos por crear un estado judío. Friedman
entrevistó a los sobrevivientes en especial a Isaac Shoshan, un nonagenario en
esta década del siglo XXI cuando Friedman ha escrito su libro, que es uno de
los personajes principales del libro.
La lectura resultó reveladora para mí, que desconozco mucho
de la historia del Estado de Israel y también resultó reveladora por la
posición crítica que Friedman toma en contra de los judíos europeos que
formaron la cúpula del poder del Estado Israelí y la forma en que despreciaron
la labor de los judíos nativos de los países árabes, así como la actitud hasta
racista que los Askenazi tomaron frente a los judíos de territorios árabes por
décadas, por su origen y el color de piel, el desprecio a una cultura que
sobrevivió en las tierras musulmanas que fue igual de difícil o en ocasiones
peor que en las tierras cristianas que habitaban los judíos europeos hasta la
llegada del nazismo.
Centrado en cuatro personajes, quiere hablar de un manojo de
hombres y mujeres que formaron la Sección Árabe una rama de la inteligencia sionista
del Palmach, por razones más que obvias predecesor del Mossad y de la
inteligencia actual del estado israelí. Hombres que muchas veces se pagaban sus
misiones con su dinero, que durante meses permanecieron incomunicados del
cuartel central, llevando a cabo su misión a ciegas y viviendo en la
incertidumbre en territorio enemigo.
Friedman además de contar una historia muy interesante, lo
hace de una manera excepcional, con la misma maestría que lo haría un novelista,
Friedman nos cuenta cómo los espías judíos volaron un taller mecánico donde los
árabes preparaban un camión con explosivos dirigido a acabar con cine al que acudían
por lo general judíos. La persecución en una carretera para intentar asesinar a
un sacerdote musulmán que estaba en contra de los judíos y mucho más del
establecimiento de un estado judío en territorio árabe.
Las acciones del libro suceden básicamente en dos ciudades
del Medio Oriente, Haifa que es parte del actual Israel y Beirut, la capital de
Líbano. La descripción de ambas ciudades hecha por Friedman resulta evocativa y
en su intensión por ser certera dibuja perfectamente una escenografía en la que
se mueven los espías, pero que además nos permite vivir las ciudades e imaginar
la fastidiosa y rutinaria acción de vigilar al sacerdote, vivir en un
departamento en los alrededores de Beirut. Los callejones en los que se
encontraba el taller mecánico. Las historias muestran como ante las condiciones
adversas en más de una ocasión los judíos árabes lograron lo que se propusieron
y lo que les ordenó y lo que le propusieron a la jerarquía y como meses después
Isaac conoció de manera más que fortuita al padre de dos de los mecánicos árabes
que trabajaban y murieron en aquel taller.
La narración de génesis de la sección árabe se creó a partir
del reclutamiento en los kibutz de los sionistas que eran visitados por
diferentes miembros del Palmach que buscaban a judíos que pudieran pasar por árabes.
Jóvenes y adolescentes eran reclutados para ser entrenados a parecer y entender
el mundo árabe, para ocultar su personalidad, su ideología, su religión con el
fin de perderse en la población musulmana y en recopilar la información que
pudieran a partir de no ser nadie en la turba. A partir de convertirse y
parecer árabes no sólo, físicamente que era lo más sencillo, sino en su forma
de comportarse, de hablar con los acentos y características de diferentes países
y ciudades de la comunidad, incluso como uno de ellos hasta convertirse en
miembro de un partido político simpatizante con la ideología nazi.
Todos los esfuerzos y logros de estos hombres fueron en su
momento menospreciados por los altivos líderes europeos de Israel, quienes, en
sus visitas a los kibutz árabes, obligaban a los nativos a retraerse ante una
mirada y comentarios con los que los judíos europeos pretendían marcar su
superioridad. Pero fue gracias a hombres y mujeres como los que muestra
Friedman a través de los amenos capítulos de su libro, los que podían infiltrarse
en el mundo árabe por todas las afinidades y características que compartían con
los otros hombres y mujeres nacidos en las zonas áridas del Sinaí y
alrededores. Como demuestra Friedman con la historia del espía pelirrojo y la rápida
manera en que fue descubierto, aunque Friedman no menciona que los servicios de
inteligencia hayan estado seguros que hayan sido sus características físicas
las que lo delataron, pero tampoco hay nada que asegure lo contrario, más
cuando al mismo tiempo otro agente de la sección árabe cruzó sin problemas la
frontera.
Spies of
No Country. Secret Lives at the Birth of Israel es un libro
excelente sobre la importancia de los actos subersivos y fuera de la ley que
permitieron establecer de manera segura un país que nació de los apoyos de los
judíos, norteamericanos y europeos que de manera arbitraria decidieron despojar
a la población palestina de su nación. La historia como la cuenta Friedman no
lo ve así y era de esperarse, pero lo que cuenta a pesar de su sesgo el libro es
revelador y muestra una parte de la guerra entre musulmanes y judíos que es
poco conocida.
Friedman,
Matti. Spies of No Country. Secret Lives at the Birth of Israel. Algonquin
Books of Chapel Hill. North Carolina 2019
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