lunes, 16 de marzo de 2020

Dos extrañas marcas automotrices




Nissan y Mazda crearon un par de modelos cuyo nombre no deja de ser inapropiado y cómico en nuestro idioma.

Armando Enríquez Vázquez.

En ocasiones los departamentos de mercadotecnia de las marcas nos deslumbran con la estupidez y falta de cultura con la que deciden nombres para nuevos productos y después se sorprenden de sufrir el escarnio eterno del público en general que gracias a los buscadores de perlas encontraran este tipo de fallos. Algunos se mofan y otros los convierten en claro ejemplo de lo que el director de mercadotecnia de cualquier empresa no puede permitir.
Este tipo de errores podría disculparse en las marcas de tiempos cuando no existía la globalización, en que los mercados regionales eran cerrados y sólo un viajero podía encontrar estos nombres y verlos como una curiosidad. Pero la llegada de Internet y las redes sociales, como bien sabemos, cambió todo eso.
Este texto trata de dos de automóviles que lograron tener nombres que en nuestro idioma son palabras que no pueden usarse para designar un automóvil y mucho menos que realmente puedan ser atractivo para el consumidor. El descubrimiento de estas joyas no es mío, pero me parece atractivo escribir al respecto.
El primer caso es una pequeña camioneta de Nissan a la que la marca nombró Moco. El Moco que no sólo es el nombre de la secreción nasal por excelencia en español, uno de los principales idiomas hablados en el mundo y el nuestro, sirve en algunos países como peyorativo y despectivo, el nombre para el modelo sólo se utilizó en Japón, pero eso no quiere decir que no sea un verdadero y muy gracioso error por parte del departamento de mercadotecnia.
El Nissan Moco, un vehículo realmente horrendo, fue presentado a los consumidores en octubre de 2001 durante el Salón del Automóvil de Tokyo en su trigésima quinta edición. El Moco es una versión de la camioneta Susuki MR. El Moco salió a la venta en abril de 2002, la segunda generación del vehículo fue presentado en 2005, el mercado del Moco fue únicamente Japón para esta nueva versión.
En febrero de 2011 se presentó la tercera generación del Moco que sin duda es aun más fea que las dos anteriores, en ese sentido alguien fue haciendo que el nombre del vehículo apelara a la más de los despectiva de sus acepciones. El Moco se produjo hasta mayo de 2016.



En 1999 Mazda comenzó a vender un modelo de camioneta pequeña a la que nombró Laputa, ofensivo como suena en español el nombre de la camioneta de Mazda que se produjo hasta 2006 nació como un homenaje al escritor Jonathan Swift quien en su libro Los Viajes de Gulliver lleva a su personaje hasta la isla flotante de Laputa. Esta idea literaria fue más que suficiente para la gente de mercadotecnia de Mazda para crear dar un nombre a su modelo, nadie al parecer se preocupó por revisar otras acepciones en otros idiomas que fueran populares y tuvieran mayor presencia en la mente del consumidor. El Mazda Laputa, como el Moco, se vendió exclusivamente en Japón.
Existen más ejemplos de nombres de automóviles con nombres fallidos en español pero que tienden a ser más regionales como el Mitsubishi Pajero que en España es clara alusión a una persona que se masturba. Aunque como quedó claro arriba estos modelos no se vendieron en el mundo de habla española, no es difícil encontrar gracias a Google la marca, el modelo y diferentes artículos haciendo mofa de los nombres de estos dos automóviles que en español serían un verdadero jolgorio para consumidores y especialistas en el tema. Así como una ofensa y motivo de protesta para los caballeros y damas de buenas conciencias que hacen jeta y se constriñen por todo.


imagenes ManualesDeTodo.net
                wikipedia.org

No hay comentarios:

Publicar un comentario