Nissan y Mazda crearon un par de modelos cuyo nombre no
deja de ser inapropiado y cómico en nuestro idioma.
Armando Enríquez
Vázquez.
En ocasiones los departamentos de mercadotecnia de las
marcas nos deslumbran con la estupidez y falta de cultura con la que deciden
nombres para nuevos productos y después se sorprenden de sufrir el escarnio eterno
del público en general que gracias a los buscadores de perlas encontraran este
tipo de fallos. Algunos se mofan y otros los convierten en claro ejemplo de lo
que el director de mercadotecnia de cualquier empresa no puede permitir.
Este tipo de errores podría disculparse en las marcas de
tiempos cuando no existía la globalización, en que los mercados regionales eran
cerrados y sólo un viajero podía encontrar estos nombres y verlos como una
curiosidad. Pero la llegada de Internet y las redes sociales, como bien
sabemos, cambió todo eso.
Este texto trata de dos de automóviles que lograron tener
nombres que en nuestro idioma son palabras que no pueden usarse para designar
un automóvil y mucho menos que realmente puedan ser atractivo para el
consumidor. El descubrimiento de estas joyas no es mío, pero me parece atractivo
escribir al respecto.
El primer caso es una pequeña camioneta de Nissan a la que
la marca nombró Moco. El Moco que no sólo es el nombre de la
secreción nasal por excelencia en español, uno de los principales idiomas
hablados en el mundo y el nuestro, sirve en algunos países como peyorativo y
despectivo, el nombre para el modelo sólo se utilizó en Japón, pero eso no
quiere decir que no sea un verdadero y muy gracioso error por parte del
departamento de mercadotecnia.
El Nissan Moco, un vehículo realmente horrendo, fue
presentado a los consumidores en octubre de 2001 durante el Salón del Automóvil
de Tokyo en su trigésima quinta edición. El Moco es una versión de la
camioneta Susuki MR. El Moco salió a la venta en abril de 2002,
la segunda generación del vehículo fue presentado en 2005, el mercado del Moco
fue únicamente Japón para esta nueva versión.
En febrero de 2011 se presentó la tercera generación del Moco
que sin duda es aun más fea que las dos anteriores, en ese sentido alguien fue
haciendo que el nombre del vehículo apelara a la más de los despectiva de sus
acepciones. El Moco se produjo hasta mayo de 2016.
En 1999 Mazda comenzó a vender un modelo de camioneta pequeña
a la que nombró Laputa, ofensivo como suena en español el nombre de la
camioneta de Mazda que se produjo hasta 2006 nació como un homenaje al escritor
Jonathan Swift quien en su libro Los Viajes de Gulliver lleva a su
personaje hasta la isla flotante de Laputa. Esta idea literaria fue más que
suficiente para la gente de mercadotecnia de Mazda para crear dar un nombre a
su modelo, nadie al parecer se preocupó por revisar otras acepciones en otros idiomas
que fueran populares y tuvieran mayor presencia en la mente del consumidor. El
Mazda Laputa, como el Moco, se vendió exclusivamente en Japón.
Existen más ejemplos de nombres de automóviles con nombres
fallidos en español pero que tienden a ser más regionales como el Mitsubishi Pajero
que en España es clara alusión a una persona que se masturba. Aunque como
quedó claro arriba estos modelos no se vendieron en el mundo de habla española,
no es difícil encontrar gracias a Google la marca, el modelo y diferentes
artículos haciendo mofa de los nombres de estos dos automóviles que en español
serían un verdadero jolgorio para consumidores y especialistas en el tema. Así
como una ofensa y motivo de protesta para los caballeros y damas de buenas
conciencias que hacen jeta y se constriñen por todo.
imagenes ManualesDeTodo.net
wikipedia.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario